El Real Santuario de María Santísima de Araceli acogió el domingo el acto de apertura del curso cofrade con la participación de la Junta de Oficiales de la Agrupación de Cofradías de Lucena, representantes de las distintas hermandades y cofradías de nuestra ciudad, el Sr. Alcalde y de varios miembros de la Corporación Municipal, así como de numerosísimos fieles y devotos.
Y al término de la misa, que estuvo presidida por el capellán-consiliario y vicario episcopal de la Campiña, David Aguilera Malagón; tras la lectura por parte del secretario de la Agrupación, Francisco Requerey Ramírez, del acta correspondiente; el presidente de esa institución, Antonio Díaz Serrano, que dedicó hermosas palabras a la labor del pueblo aracelitano, hacía entrega al hermano mayor, Antonio Crespillo Guardeño, de la medalla de oro de la Agrupación de Cofradías de Lucena.
Antonio Crespillo agradecía el galardón en nombre de todos los que a lo largo de los 450 años de presencia en Lucena de la Bendita imagen de Nuestra Señora de Araceli han venido trabajando por su devoción: capellanes, hemanos mayores, juntas de gobierno, Obra Pía, patronos, hermanacos, camareras, guardeses y hermanos en general.
La concesión de la medalla había sido acordada por el Pleno de la Agrupación de Cofradías en el transcurso de la asamblea de cierre del curso cofrade 2012-2013, celebrada el pasado 11 de junio, a propuesta del presidente y junta de oficiales.
Con este nombramiento, la institución que agrupa a las hermandades lucentinas viene a reconocer y agradecer a cuantos hombres y mujeres han velado y trabajado de forma ejemplar, a lo largo de todo este tiempo y hasta el día de hoy, por la devoción aracelitana y su cofradía.
