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viernes, 13 de septiembre de 2013

El Via Crucis Magno de Córdoba, en cinco claves

Será un sueño hecho realidad pensar en lo que pasará en Córdoba mañana, 14 de septiembre. Aquello que ya está a la vuelta de la esquina tiene la textura de un sueño y sin embargo está a punto de hacerse realidad ante los ojos asombrados de decenas de miles de personas que llenarán las calles cordobesas.

La Semana Santa, en la que las cofradías nacen y viven, se explica por sí misma por la fuerza de la tradición, pero el Via Crucis Magno sí que necesitan alguna aclaración. Por eso es bueno responder a las preguntas que mucha gentese hace.

¿Qué es el Via Crucis Magno?

Es la forma en que las cofradías celebran el Año de la Fe, decretado por el Papa Benedicto XVI el año pasado, y que en muchas diócesis se ha revestido de gran solemnidad.

Para ello, escenificarán la Pasión de Cristo con todas sus estaciones mediante 18 pasos, siempre según el orden en que sucedió desde la Oración en el Huerto hasta el Señor Resucitado. Entre ellos irán el Señor Rescatado, Jesús de las Penas, Jesús de la Redención, Jesús de la Sentencia; la Coronación de Espinas; Jesús de la Pasión; Jesús Caído; el misterio de la Santa Faz; Humildad y Paciencia; Cristo del Amor; Cristo de la Expiración; Cristo del Remedio de Ánimas; Descendimiento; Virgen de las Angustias y Santo Sepulcro. Se han escogido a las cofradías por la adecuación a las escenas y la calidad artística. Ningún paso va sin terminar.

Lo abrirá de forma excepcional Nuestra Señora Reina de los Mártires, la única Dolorosa bajo palio de la cita. Las imágenes irán siempre en sus pasos procesionales con sus misterios, si los tienen, y con un cortejo que incluye cruz de guía, diez parejas de hermanos, sin atuendo de nazareno y con cirios, y estandarte.


¿Por qué se organiza ahora?

La celebración de una gran procesión es un viejo sueño para las hermandades, que, espoleadas por el obispo de la diócesis, vieron una ocasión en este Año de la Fe. La cita evoca en cierta manera las viejas procesiones oficiales del Viernes Santo, que se celebraron desde 1849 hasta bien entrado el siglo XX, con algunas de las imágenes que no faltarán en esta cita, aunque otras ni siquera existían entonces.

¿Por dónde discurrirá?

El Via Crucis Magno tiene un recorrido, a modo casi de carrera oficial, que comienza en la Cruz del Rastro, continúa por la Ribera y pasa bajo la Puerta del Puente. Está previsto que la Reina de los Mártires llegue a las 20.45 horas a la Puerta del Puente, y que el ritmo sea muy vivo.

Desde el Triunfo seguirán por la calle Torrijos para entrar en la Catedral por la Puerta del Perdón y después por la de las Palmas. En todo el recorrido común habrá sillas que se alquilan por precios que van desde los 6 hasta los 10 euros, y será la única forma de ver la secuencia completa.

Al término del acto previsto en la Catedral, los pasos emprenderán el regreso, aunque no siempre por el orden de llegada. Lo harán por la Puerta del Perdóny por la de Santa Catalina de forma alternativa, para aligerar la marcha.

¿Cómo irán las cofradías por el recorrido común?

Aunque las hermandades que lo deseen llevarán música en sus caminos de ida y vuelta, tendrán que prescindir de ella al llegar a la Cruz del Rastro. Las únicas excepciones serán Nuestra Señora Reina de los Mártires, que sí irá con banda de música, y el coro de hermanos entonando el Miserere tras el Cristo del Remedio de Ánimas.

Ante Nuestra Señora Reina de los Mártires irán las cruces de guía de las hermandades, participantes o no, que deseen estar. La titular de la Buena Muerte presidirá un homenaje a los Santos Mártires de Córdoba, presentes en su advocación, y recibirá una ofrenda de cera y flor.

Al llegar al Triunfo será el rezo de las estaciones, que leerá el cofrade Fermín Pérez Martínez y que dirigirá el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández. Al llegar a la Catedral, y una vez que estén todos los pasos allí, habrá una homilía, también pronunciada por el prelado, y una exposición del Santísimo, a la que asistirán sólo los cortejos de las cofradías. 

¿Qué hará quién no pueda estar en el recorrido común?

Unas 8.000 personas serán las que puedan ver completa la secuencia en su entorno. Los demás optarán por los traslados, que además tendrán el aliciente de que cada cofradía irá con su banda. Córdoba tendrá pasos en la calle desde las cinco de la tarde hasta casi las cuatro de la madrugada. Por motivos de seguridad, no habrá largos cortejos de hermandades seguidas, pero sí calles por las que se verán a varias seguidas, según la ruta por la que lleguen.

Así, por Cardenal González, después de bordear la Catedral llegarán la Reina de los Mártires, la Sentencia, Pasión y la Santa Faz. Por Capitulares y San Fernando, la vía en principio más corta para muchas, lo harán la Redención, Jesús Caído, Humildad y Paciencia, Expiración, Angustias, Sepulcro y Resucitado. Varias radicadas en la zona oriental irán por San Pedro y la calle Lucano, una zona histórica no siempre bien utilizada. Será el camino para el Rescatado, Jesús de las Penas, Coronación de Espinas y Remedio de Ánimas.

Por el Puente de Miraflores llegarán el Cristo del Amor y el Descendimiento. La vuelta tendrá a hermandades en la calle hasta pasadas las tres de la madrugada, de nuevo con sus bandas, también por caminos singulares, como la Expiración por San Pedro y la Corredera.







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