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lunes, 2 de septiembre de 2013

Fray Ricardo de Córdoba: "Vestir una imagen es rezar con la mirada, las manos y el corazón"

Entrevista realizada a Fray Ricardo de Córdoba por Francisco Mellado el 27 de septiembre de 2009 para Diario Córdoba.

El 24 de septiembre de 2009 el popular capuchino fray Ricardo de Córdoba recogió de manos de la cofradía de la Merced el título de vestidor de honor. Una merecida distinción no solo por su trabajo en esta cofradía sino en tantas otras a las que el capuchino ha dedicado infinitas horas de su vida vistiendo imágenes, diseñando ajuares cofrades o predicando.

Fray Ricardo de Córdoba se encuentra en la actualidad a caballo entre Jerez de la Frontera y Sevilla. En esta última ciudad pronunciará dentro de un mes en el teatro Lope de Vega el pregón del 450 aniversario fundacional de la hermandad de Montesión.

¿Qué ha supuesto para fray Ricardo el nombramiento de vestidor de honor concedido hace unos días?

Ha supuesto, primeramente, una llamada de Córdoba que es mi tierra, pero además la demostración del cariño permanente que durante tantos años a fray Ricardo le ha tenido mi tan querida cofradía de la Virgen de la Merced, sin haberme fallado nunca.

¿Qué significa para fray Ricardo esta imagen?

Para mí... Desde niño que conocí la antigua imagen como digo extensamente en el boletín de su hermandad, la Virgen de la Merced ha significado una bendición, marcado por el hecho de haber nacido en el Campo de la Merced, actual plaza de Colón, donde yo siempre fantaseaba con la Semana Santa de Córdoba sin todavía nunca haber tocado una imagen, ni haber diseñado un palio. Después, la hermandad me llamó para hacerme cargo de la Virgen antigua y con el tiempo, como amigo de Francisco Buiza, pude ver nacer (tallar) en su taller sevillano la actual imagen.



¿Qué ha significado para fray Ricardo vestir una imagen de la Virgen?

Es un acto de culto cofrade porque sale del amor a la Madre de Dios, lo mismo que aquel que le pone la cera o le lleva flores o le dibuja, no tendría sentido ese trabajo si no fuera con amor sobrenatural. En definitiva, vestir a una imagen es rezar con la mirada, las manos y el corazón.

Junto a su labor de vestidor está su dedicación al diseño para cofradías. ¿Qué puede decir de sus últimas aportaciones importantes para la Semana Santa de Córdoba?

Ahora un poco más lejos de Córdoba, pues estoy en Jerez de la Frontera aunque con permanencia continua en Sevilla, donde trabajé ilusionado en el manto de Nuestra Señora de la Paz y Esperanza de mi convento de Capuchinos. Pero inmediatamente y con toda la confianza de la hermandad cordobesa del Descendimiento he cuajado sin ninguna cortapisa por parte de la hermandad ni variación de mi idea artística el impresionante manto rojo, aún más rico de dibujo que el de la Virgen de la Paz, para la Virgen morena del Buen Fin que ciertamente cuando entra el Viernes Santo en el Campo de la Verdad pone el broche de oro a últimas horas de la noche a la Semana Santa cordobesa.

Conociendo a fray Ricardo, supongo que habrá muchos más proyectos.

Por supuesto, ahora estoy haciendo más dibujos para otras semanas santas andaluzas: un palio entero, manto, saya y faldones para una cofradía de Jerez; el palio entero de la Virgen de la Trinidad de la hermandad del Rescatado de Cádiz; el palio completo de la hermandad del Resucitado de Linares; el palio y manto de la Virgen de los Dolores de Almagro, Ciudad Real, que este año sale entero bordado por fuera. En cuanto a la provincia de Córdoba, he diseñado el palio de la Virgen de la Amargura del Nazareno de Juan de Mesa de la Rambla, así como varias piezas de culto para distintas localidades.

Junto a estas labores de diseñador y vestidor otra faceta suya es la predicación ¿Qué le queda por predicar a fray Ricardo?

Reconozco que mi amor por las cofradías toca mi trabajo franciscano y sacerdotal de la predicación y en él he predicado en todas las provincias andaluzas, así como en otras regiones. Cultos importantes, coronaciones canónicas y para muestra de esa intensidad sin haber nacido en Sevilla, a la Macarena fray Ricardo de Córdoba la ha predicado ocho veces.

¿Cree que las cofradías de Córdoba valoran a personas como fray Ricardo, que durante tantos años y desinteresadamente ha trabajado por nuestra Semana Santa?

Generalmente sí, pero también tengo una página de ingratos que la pasé y cerré el libro. No pretendo recibir nada, pero la cofradía de la Merced es modelo para mí de amistad fiel.

¿Qué le falta a la Semana Santa de Córdoba?

Que la quiera más el cordobés y entre más la sociedad en esta gran celebración que tanto expresa cultural y religiosamente a una ciudad. Pienso que Córdoba tiene pero no sabe tener, en cambio, en este sentido, estoy maravillado de la grandeza completa de una ciudad más pequeña como Jerez.

¿Quiere añadir algo?

Sí. Virgen de la Merced de San Antonio de Padua, te quiero como siempre y más aún, y a tu hermandad le doy mi corazón con todo reconocimiento. Gracias.


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