El Via Crucis Magno dará imágenes inéditas o reeditadas de paso de cofradías por calles y plazas varias décadas después.
Que el Via Crucis Magno por el Año de la Fe será un acto no sólo piadoso sino también histórico para Córdoba y sus hermandades es, a estas alturas, indiscutible. Como lo es que histórico e inédito será el paso de muchas cofradías por las calles que las llevarán hasta la Santa Iglesia Catedral y el recorrido oficial que parte de la Cruz del Rastro.
La ribera del Guadalquivir será un lugar de tránsito nuevo para todas las cofradías participantes, así como el paso bajo la Puerta del Puente para todas excepto la hermandad del Amor, que ya ha atravesado el dintel el Domingo de Ramos en su procesión de Semana Santa. Algunos titulares pisarán por primera vez algunas calles y otras vías verán incrementar el tránsito cofrade respecto a lo que es habitual en Semana Santa. Incluso, habrá sitios en los que se repetirán estampas, ya actualizadas, que no se producen desde hace tiempo.
La Catedral tendrá gran protagonismo. Será un escenario inédito para algunas hermandades y recuperado para otras. Hasta allí se encaminarán todas una vez leídas las estaciones correspondientes a cada paso junto a la plaza del Triunfo. De nuevo será el momento de contemplar estampas nunca vistas.