La hermandad filial de Puente Genil fue fundada en 1982, año en el que los peregrinos pontaneses realizaron su primer camino a la aldea. Tres décadas después, el actual presidente, Manuel Fernández, se enorgullece de estar al frente de la hermandad y participar en primera persona en la organización del Rocío de la Fe en la capital. «Será un acto irrepetible, ya que todo lo que venga detrás no tendrá esta relevancia», dice.
Además, Puente Genil tendrá «un lugar privilegiado en este acto», ya que Javier Aguilar, hermano y artista local, ha sido el encargado de elaborar el cartel anunciador. Por otro lado, el coro rociero local Los Peregrinos cantará en el Solemne Pontifical.
Fernández entiende que el Rocío de la Fe «será un revulsivo en el mundo rociero de la provincia, porque Córdoba tiene un importante potencial». Será, prosigue, «un escaparate para esta hermandad, la de Puente Genil, que tiene gran categoría» al mismo tiempo «el orgullo de ser la que más camino realiza para llegar a la aldea de Almonte». En concreto, nueve días de peregrinación.
Como peculiaridad de la hermandad pontana destaca que la mitad de sus hermanos son vecinos de la localidad y, el resto, de otros muncipios aledaños, «cuestión que la enriquece mucho», agrega Fernández. Reconociendo que en Puente Genil es «un pueblo con gran tradición manantera», el presidente de la Hermandad del Rocío dejó claro que la suya es «la única que sale fuera y actúa como embajadora de nuestro pueblo; también porque es nuestra forma de ser». Motivo éste por el cual reclamó que se «apoye más» su actividad.