LO ÚLTIMO

sábado, 29 de marzo de 2014

Nisán: XXV La Exaltación del Perdón



La voz del centurión atruena en los espíritus afligidos con su impasible autoridad, con su inhumana indiferencia… con un dedo ordena levantar la cruz del destino para multiplicar nuestro dolor y arrojarnos por el abismo de la desesperación más oscura. Y me pregunto entre dudas y lágrimas si merece este sacrificio un universo que tolera que el Rey del Cielo sea masacrado y humillado sin mover un músculo para evitarlo. 

Quiero comprender la infinitud del miedo a ser crucificado a tu lado pero me rebelo vestido de la insurrección más inconsciente creyendo en mi ingenuidad que sería capaz de dar mi vida por Ti, ocupando tu lugar en el madero. Y descubro la realidad de mi cobardía al contemplar horrorizado cómo se va clavando tu silueta en el firmamento, mientras mi fe se desangra lentamente en la carencia más absoluta y en la lejanía del caudal de tu esencia que parece abandonarnos sin remisión…Y justo en ese instante, tu Divinidad derrama como una catarata de emociones tu Perdón a toda la humanidad, para que todo comience lentamente a adquirir sentido…

Elevó la Cruz la orden del verdugo
hiriendo como un asta el Cielo.

A la orden del romano
levantaron el madero
con tu cuerpo ensangrentado
y aplastaron el anhelo
de esperar un gesto humano.

Sometidas voluntades,
castigados sentimientos
por el yugo más cobarde...
y el cruel padecimiento
que han sufrido tus verdades.

Y la Cruz como una daga
se clavó en el Firmamento
que lentamente lloraba
lágrimas de sufrimiento,
por tu Sangre derramada.

Guillermo Rodríguez




Hoy en GdP