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miércoles, 25 de junio de 2014

Los siete hitos de Manuel Soria como delegado de Hermandades



Marcelino Manzano ha sido designado como delegado diocesano de Hermandades y Cofradías. Releva en el cargo a Manuel Soria Campos, que lo ha ocupado casi 14 años. Dos arzobispos, tres presidentes del Consejo, ocho coronaciones canónicas en la capital, el traslado de la Virgen de Regla a Madrid o la gestión del Vía Crucis del Año de la Fe son algunos de los hitos que han marcado los años de Soria al frente de la Delegación que ahora deja.

1. Tres decretos de coronación firmados en un día

El 12 de enero de 2005 Soria comunicó la buena noticia a tres hermanos mayores: sus dolorosas iban a ser coronadas. La Virgen de la Palma, la Esperanza de la Trinidad y la Virgen de la O, se encontraban hasta entonces en «lista de espera» para la aprobación de sus coronaciones. Ese día se vieron cumplidos los anhelos de sus tres hermandades con la firma del arzobispo de entonces, el cardenal Amigo Vallejo.

Representativo este día en el mandato de Manuel Soria en la Delegación, ya que con él se coronaron hasta ocho imágenes marianas de la capital. La Pura y Limpia del Postigo, la Virgen de los Dolores del Cerro, la Virgen del Valle, la Virgen del Rosario de Montesión, la de la Palma, la Esperanza de la Trinidad y la O. Por último la Virgen de Regla, que sería la última coronada en la ciudad cerrando este maratoniano calendario de coronaciones, prácticamente una por año. Muy especial sería para Soria esta última, ya que pertenece a la nómina de la Hermandad de los Panaderos.


2. Llegada del nuevo arzobispo

El 17 de enero de 2009 se abría la puerta de la Asunción de la Catedral para recibir a un nuevo arzobispo. Monseñor Juan José Asenjo tomaba ese día posesión como nuevo pastor de la Archidiócesis. Sevilla despedía al Cardenal Amigo y Soria al arzobispo que lo había designado. En ese momento tendría que adaptarse al nuevo sucesor de San Isidoro y actuar de interlocutor el nuevo mandatario y el complicado mundo de las cofradías de Sevilla.


3. Mujeres nazarenas por decreto

Tres cofradías, el Silencio, el Santo Entierro y la Quinta Angustia, seguían teniendo su cortejo sólo formado por hombres hasta entonces. Es en febrero de 2011 cuando se promulgó el decreto por parte del arzobispo que igualaba a hombres y mujeres en el derecho a hacer estación de penitencia a la Catedral. Ni las normas diocesanas del 97 o la exhortación del Cardenal Amigo fueron suficientes. La mano de Asenjo firmó la imposición que permitiría desde entonces que cualquier mujer saliera de nazarena en su cofradía. Pero antes de esta firma, Soria había recorrido un largo camino de diálogo con las cofradías para que fueran ellas mismas las que tomaran la decisión. Pero se le resistieron tres.


4. Participación de la Virgen de Regla en el Vía Crucis de Madrid

Se proyectaba un acto que reuniera a imágenes de cofradías de distintos puntos de España para rezar con el Papa un vía crucis en Madrid dentro de las Jornadas Mundiales de la Juventud. La Semana Santa de Sevilla estuvo presente en este acto, y no lo hizo con una imagen cristífera sino con una de la Virgen María. Soria gestionó el traslado de la dolorosa de los Panaderos hasta la capital, en uno de los hitos más importantes de sus años en la delegación. Con ella acudieron cientos de sevillanos que acompañaron a la Virgen de Regla en su periplo madrileño. Un hito que no estuvo exento de polémica. Antes de que se comunicara que sería la dolorosa la que acudiría a la capital de España, las hermandades del Cachorro y de la Esperanza de Triana se negaron a trasladar a sus titulares. Un ágil movimiento de Manuel Soria consiguió que Sevilla estuviera presente en aquel Via Crucis, lo que le hizo apuntarse un tanto ante el arzobispo.


5. Gestión de la crisis por la dimisión de Adolfo Arenas

A finales de octubre de 2012 dimitió el presidente del Consejo de Hermandades y Cofradías, Adolfo Arenas. El motivo: los enfrentamientos que existían y que perduran en la junta superior de la institución. Un problema que ni Arenas ni el propio Soria pudieron solucionar y que acabó con la marcha del primero. La dimisión, aceptada desde el primer momento por el arzobispo, no puso fin a este conflicto. Aunque se confía que con los nuevos estatutos si pueda ponerse punto y final a esta historia que enfrenta a unos y a otros en el seno del Consejo, la realidad es que el desprestigio de esta institución es patente.


6. Organización del Vía Crucis de la Fe

Estaba previsto que el 17 de febrero del año 2013 pasara a la historia de la cofradías de Sevilla. Un Vía Crucis solemne iba a reunir hasta a 17 imágenes cristíferas de la ciudad en sus pasos en el entorno de la Catedral y el Alcázar. Finalmente quedó en un anhelo y el acto tuvo que suspenderse. Antes, unos meses intensos de preparación con numerosas polémicas. El final fue un auténtico caos producido por la lluvia y que llevó a algunas hermandades a tomar decisiones sin tener en cuenta a las demás. El sueño terminó en un acto suspendido pero con un paso en la calle: el de Torreblanca, en contra del criterio del delegado de hermandades. A buen seguro que Soria no olvidará esa mañana.


7. Reacción ante las procesiones “piratas”

La proliferación en los últimos años de este tipo de cofradías denominadas civiles ha obligado al Arzobispado a tomar cartas en el asunto y a emprender acciones en este 2014. Soria, junto con el vicario general, Teodoro León, iniciaron un intento de encauzar este fenómeno, que llegaba con pasos salidos de carpas hasta las mismísimas puertas del Palacio Arzobispal. Manuel Soria se ha visto obligado a recordar los pasos necesarios para que estos colectivos rectifiquen su actitud y comiencen de cero, si es necesario, pero dentro de sus correspondientes parroquias.





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