Hoy viernes 18 de julio de 2014 se recuperará la procesión fluvial de la Virgen del Carmen por el Guadalquivir, la cual llevaba 13 años sin organizarse.
Pero ¿cuándo comenzó esta celebración?
El día 16 de julio de 1929 comenzaba con misa en las iglesias de la orden carmelita de nuestra ciudad; a las 10 en Santa Ana y el Carmen, y a las 10.30 en el Convento de San Cayetano. Posteriormente, ya por la tarde, se organizó a partir de las 20.00 horas la tradicional procesión de la Virgen del Carmen de San Cayetano, yendo el cortejo precedido por los batidores de la guardia municipal de caballería, seguidos de niños y niñas, "señoras y señoritas", con velas encendidas, la propia hermandad y alumnos del colegio carmelitano.
La procesión la componían las imágenes del Niño Jesús de Praga, Santa Teresa de Jesús y la Virgen del Carmen, siendo acompañadas por las bandas de música municipal y del Regimiento de la Reina, las cuales interpretaron "escogidas marchas religiosas". Los edificios del itinerario mostraban preciosas colgaduras, estando las calles llenas de público y fieles (y dado que se trata del año 1929, doy más credibilidad a las crónicas en prensa local de aquellas publicadas a partir de 1936).
Por cierto, el hermano mayor de la hermandad era por aquel entonces Rafael Jiménez Amigo.
Sin embargo la noticia de aquel peculiar 16 de julio no estaba en San Cayetano, sino en el río Guadalquivir. Corrían exactamente las 20:00 horas, cuando se organizaba la primera procesión fluvial con la Virgen del Carmen en nuestra ciudad, siendo descrita como una fiesta "agradabilísima y simpática". En alguna ocasión me he mencionado el día del Carmen como aquel a partir del cual las personas que vivían en la costa comenzaban la temporada de baño, pues era precisamente ese día en el que la Virgen bendecía las aguas. Y curiosamente aquel 16 de julio de 1929 ocurrió en Córdoba lo mismo, pues el motivo de la organización de esta curiosa procesión fluvial fue precisamente la inauguración de la temporada de baños en el Guadalquivir así como la bendición de tres embarcaciones adquiridas por el propietario de los baños, señor Ruiz Solá.
Dicha bendición, primer acto del día, fue llevaba a cabo por el rector de San Pedro, Juan Jaén Abril, cubierto con capa pluvial y siendo asistido por Francisco Aguilar Gómez y Juan Roldán Herrera; diácono y subdiácono, respectivamente.
Millares de "criaturas" llenaron el paso de la Ribera, muchas de las cuales llegaron montadas en los muchos automóviles que acercaron a los cordobeses hasta su río. La animación que mostraba la Ribera era "inusitada", en lo que colaboró la banda de cornetas y tambores del Ave María (a la cual ya me he referido en algunos artículos), que organizó un pasacalles desde la recientemente inaugurada plaza de Cánovas hasta la Cruz del Rastro.
Finalizada la bendición se produjo el paseo por le Guadalquivir de la imagen de la Santísima Virgen, sobre una barca "artísticamente decorada" con macetas y flores. Al dejar el embarcadero comenzaron a escucharse los acordes de la Marcha Real, alcanzando el Puente Romano entre vítores y regresando al punto de partida. Tras ella marchaban otras embarcaciones "presentando el cauce del río un aspecto brillantísimo".
De esta procesión se cumplen ahora 85 años, aunque la imagen que se utilice el próximo viernes pertenece a la Federación de Peñas y la de entonces a la Iglesia del Carmen de Puerta Nueva.
Pero ¿cuándo comenzó esta celebración?
El día 16 de julio de 1929 comenzaba con misa en las iglesias de la orden carmelita de nuestra ciudad; a las 10 en Santa Ana y el Carmen, y a las 10.30 en el Convento de San Cayetano. Posteriormente, ya por la tarde, se organizó a partir de las 20.00 horas la tradicional procesión de la Virgen del Carmen de San Cayetano, yendo el cortejo precedido por los batidores de la guardia municipal de caballería, seguidos de niños y niñas, "señoras y señoritas", con velas encendidas, la propia hermandad y alumnos del colegio carmelitano.
La procesión la componían las imágenes del Niño Jesús de Praga, Santa Teresa de Jesús y la Virgen del Carmen, siendo acompañadas por las bandas de música municipal y del Regimiento de la Reina, las cuales interpretaron "escogidas marchas religiosas". Los edificios del itinerario mostraban preciosas colgaduras, estando las calles llenas de público y fieles (y dado que se trata del año 1929, doy más credibilidad a las crónicas en prensa local de aquellas publicadas a partir de 1936).
Por cierto, el hermano mayor de la hermandad era por aquel entonces Rafael Jiménez Amigo.
Sin embargo la noticia de aquel peculiar 16 de julio no estaba en San Cayetano, sino en el río Guadalquivir. Corrían exactamente las 20:00 horas, cuando se organizaba la primera procesión fluvial con la Virgen del Carmen en nuestra ciudad, siendo descrita como una fiesta "agradabilísima y simpática". En alguna ocasión me he mencionado el día del Carmen como aquel a partir del cual las personas que vivían en la costa comenzaban la temporada de baño, pues era precisamente ese día en el que la Virgen bendecía las aguas. Y curiosamente aquel 16 de julio de 1929 ocurrió en Córdoba lo mismo, pues el motivo de la organización de esta curiosa procesión fluvial fue precisamente la inauguración de la temporada de baños en el Guadalquivir así como la bendición de tres embarcaciones adquiridas por el propietario de los baños, señor Ruiz Solá.
Dicha bendición, primer acto del día, fue llevaba a cabo por el rector de San Pedro, Juan Jaén Abril, cubierto con capa pluvial y siendo asistido por Francisco Aguilar Gómez y Juan Roldán Herrera; diácono y subdiácono, respectivamente.
Millares de "criaturas" llenaron el paso de la Ribera, muchas de las cuales llegaron montadas en los muchos automóviles que acercaron a los cordobeses hasta su río. La animación que mostraba la Ribera era "inusitada", en lo que colaboró la banda de cornetas y tambores del Ave María (a la cual ya me he referido en algunos artículos), que organizó un pasacalles desde la recientemente inaugurada plaza de Cánovas hasta la Cruz del Rastro.
Finalizada la bendición se produjo el paseo por le Guadalquivir de la imagen de la Santísima Virgen, sobre una barca "artísticamente decorada" con macetas y flores. Al dejar el embarcadero comenzaron a escucharse los acordes de la Marcha Real, alcanzando el Puente Romano entre vítores y regresando al punto de partida. Tras ella marchaban otras embarcaciones "presentando el cauce del río un aspecto brillantísimo".
De esta procesión se cumplen ahora 85 años, aunque la imagen que se utilice el próximo viernes pertenece a la Federación de Peñas y la de entonces a la Iglesia del Carmen de Puerta Nueva.
David Simón Pinto Sáez
Recordatorio De Historia y Vida de la Semana Santa: Antiguas procesiones de Minerva (y del Corazón de Jesús de San Francisco)