La prisión provincial de Alhaurín El Grande ha recibido este fin de semana la visita de Jesús 'El Rico'. El secretario general de Instituciones Penitenciarias, Ángel Yuste, se desplazó a Málaga para participar del acto religioso en honor al devocional Nazareno, que por primera vez en su historia ha cruzado las puertas de esta cárcel malagueña.
Con motivo de esta ceremonia, enmarcada en la programación organizada por el 75 aniversario de la imagen, la talla fue trasladada desde la iglesia de Santiago hasta la prisión. Desde este domingo ya se encuentra nuevamente al culto en su sede canónica.
Durante el acto religioso, según han informado en un comunicado desde la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, Yuste estuvo acompañado por el subdelegado del Gobierno en Málaga, Jorge Hernández Mollar. A la ceremonia también asistieron, entre otros, el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Alhaurín de la Torre, Gerardo Velasco; el director del centro penitenciario, Ángel Herbella; el jefe provincial del Cuerpo Nacional de Policía, Pedro Garijo; el presidente de la Agrupación de Cofradías de Málaga, Eduardo Pastor; el hermano mayor de El Rico, Antonio Martínez, y la jueza y la fiscal de Vigilancia Penitenciaria, María Teresa Guerrero y María Victoria Sánchez, respectivamente.
El salón de actos del centro penitenciario sirvió de escenario para la celebración de la misa, a la que acudieron unos 150 internos. Así, reclusos y funcionarios han tenido la oportunidad de orar a Jesús El Rico dentro de la prisión malagueña. La coral Santa María del Mar de Torremolinos puso el broche final al acto religioso. Por la tarde, la imagen estuvo expuesta en besapiés.
Este acto refuerza los lazos entre devocionales de los reclusos malagueños con El Rico. La Hermandad, que nombró a Instituciones Penitenciarias hermano mayor honorario hace varias décadas, aceptó la propuesta de trasladar a su imagen titular y se comenzó a trabajar en ella hasta hacerla realidad.
Liberación de un preso
La relación entre Instituciones Penitenciarias y esta cofradía data de la época de Carlos III, cuando Jesús El Rico obtuvo el privilegio real de liberar a un preso en la parada que el Nazareno hacía a las puertas de la antigua cárcel durante la procesión de Semana Santa. El Rey le otorgó este beneficio después de conocer que un grupo de presos de la antigua prisión corrió a sacar el trono ante la imposibilidad de los malagueños para hacerlo. La peste que asoló en esas fechas la ciudad impidió a las cofradías salir a la calle. En ese escenario los presos propusieron a los funcionarios hacerlo ellos con la promesa de regresar una vez acabada la procesión.
Ante esta propuesta, los guardias se opusieron. Fue entonces cuando los reclusos se amotinaron y salieron de la cárcel para sacar en procesión a El Rico. Después de devolverlo a su templo, cumplieron su palabra y volvieron a la prisión. Sólo uno lo hizo al día siguiente portando la cabeza de San Juan Bautista El Degollado, reliquia que pertenecía a una antigua cofradía que socorría a los presos proporcionándoles alimentos y ayuda y que parece que obró un milagro sanando a uno de los reclusos sublevados. La cabeza estuvo desaparecida hasta que en 1927 el por entonces director de la prisión de Málaga hizo saber que había permanecido todo el tiempo en las instalaciones penitenciarias. Dos años más tarde la Real Cofradía y el responsable de la cárcel acordaron prestarla para la procesión.
A partir de la Semana Santa de 1997 y tras unos años conservada en el Museo de Málaga, la cabeza de San Juan Bautista volvió a procesionar con continuidad a los pies de Jesús El Rico. En la actualidad, el Miércoles Santo un preso indultado por el Consejo de Ministros, a propuesta de la Cofradía, sale con El Rico y queda liberado durante la procesión.
Recordatorio El Rico regresa a Santiago tras su restauración