No dejen de visitar la exposición conmemorativa del 25 aniversario de la primera salida procesional del Cerro del Águila (hasta el día 21 en el patio de la Fundación Cajasol). Allí verán que, además de clausurar un ciclo con un repaso histórico y sentimental a su primer cuarto de siglo de vida como cofradía penitencial, la hermandad cerreña lanza un guiño a su proyecto de futuro más inmediato con la presencia en la muestra de una fotografía a tamaño natural del Nazareno de la Humildad y del boceto de la cabeza de este Cristo sobre el que Juan Manuel Miñarro volcó sus amplios estudios en torno a la Sábana Santa de Turín.
En mayo de 2015 se cumplirán diez años de la bendición de esta talla con la que su autor, aun siguiendo modelos barrocos, introdujo importantes novedades estilísticas en la iconografía del Nazareno sevillano. Solventados los trámites jurídicos con la última reforma de Reglas, a nadie escapa que la incorporación de este Nazareno al cortejo procesional está cada vez más cerca y que la junta de gobierno que saldrá de las urnas el próximo día 28 –José de Anca repetirá mandato– iniciará más pronto que tarde los trámites para embarcar a la hermandad en este ilusionante proyecto, previa anuencia del Martes Santo y con el aval del cabildo general de hermanos.
Y aunque el estilo del tercer paso procesional del Cerro sea un debate todavía menor a estas alturas, el padre de la obra ya tiene hecha su propia noción de cómo debe procesionar el Nazareno: «sobre un paso dorado y acompañado de una agrupación musical». Es más, Miñarro –que se incorpora a la junta como promotor sacramental– apuesta, sin romper moldes, por «personalizar» las andas de este Nazareno de melena recogida en una coleta y de facciones sindónicas. «No poner la cartela de siempre y los evangelistas, sino profundizar en esa filosofía que diferencia a esta imagen de otras». Y hasta tiene concebida ya una cruz de tipo mixto –de cantos redondos y cruz plana– para el estreno procesional del Señor de la Humildad.
En mayo de 2015 se cumplirán diez años de la bendición de esta talla con la que su autor, aun siguiendo modelos barrocos, introdujo importantes novedades estilísticas en la iconografía del Nazareno sevillano. Solventados los trámites jurídicos con la última reforma de Reglas, a nadie escapa que la incorporación de este Nazareno al cortejo procesional está cada vez más cerca y que la junta de gobierno que saldrá de las urnas el próximo día 28 –José de Anca repetirá mandato– iniciará más pronto que tarde los trámites para embarcar a la hermandad en este ilusionante proyecto, previa anuencia del Martes Santo y con el aval del cabildo general de hermanos.
Y aunque el estilo del tercer paso procesional del Cerro sea un debate todavía menor a estas alturas, el padre de la obra ya tiene hecha su propia noción de cómo debe procesionar el Nazareno: «sobre un paso dorado y acompañado de una agrupación musical». Es más, Miñarro –que se incorpora a la junta como promotor sacramental– apuesta, sin romper moldes, por «personalizar» las andas de este Nazareno de melena recogida en una coleta y de facciones sindónicas. «No poner la cartela de siempre y los evangelistas, sino profundizar en esa filosofía que diferencia a esta imagen de otras». Y hasta tiene concebida ya una cruz de tipo mixto –de cantos redondos y cruz plana– para el estreno procesional del Señor de la Humildad.
La ampliación de la Madrugá
Hay hermanos mayores del Jueves Santo que mantienen muy fresco en la memoria el pacto de respeto mutuo que se entabló con la Madrugá bajo la presidencia de Luis Rodríguez-Caso a cuenta del último adelanto horario de esta jornada. Se trató de una ampliación ad experimentum a la que los hermanos mayores del Jueves se opusieron, negándose a establecerla como definitiva. El recordado Antonio Domínguez Valverde tuvo que intervenir para calmar los ánimos.
Al final, la mediación del vicario general hizo posible que la Madrugá mantuviera su adelanto horario a cambio de que se no se traspasara más la barrera fijada. ¿Se respetará el acuerdo o nada es inamovible?
Al final, la mediación del vicario general hizo posible que la Madrugá mantuviera su adelanto horario a cambio de que se no se traspasara más la barrera fijada. ¿Se respetará el acuerdo o nada es inamovible?