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miércoles, 10 de diciembre de 2014

Antonio Martín responde a Navarro Arteaga sobre la polémica de Cristo de Pasión y Muerte


Blas Jesús Muñoz. Durante las últimas semanas hemos asistido a la polémica surgida entre el imaginero José Antonio Navarro Arteaga y la Hermandad de Pasión y Muerte, a cuenta de la complicada salida de la Imagen y los daños a que la misma se puede ver sometida en palabras del imaginero, emitidas a diversos medios de la capital hispalense.

El recién elegido hermano mayor de la cofradía de vísperas, Antonio Martín, también ha querido hacerse eco de este asunto en una entrevista publicada a De Nazaret a Sevilla. En la misma ha señalado que "El Cristo de Pasión y Muerte no sufre ningún desperfecto, de hecho el mismo escultor –Navarro Arteaga- hace dos años nos argumentó que la imagen estaba perfectamente". Toda vez que insiste en el perfecto estado de conservación de la talla. "Nosotros no la maltratamos durante el año, se cambia una vez de cruz -la cual es maciza, no hueca- para la salida –no somos los únicos-. ¿Por qué se deteriora? ¿Por qué se levanta? Hay crucificados en Sevilla que van durante todo su recorrido tumbados, y no pasa nada"

A su vez, respecto a la opinión de José Antonio Navarro Arteaga señala que "lo tomaré en consideración cuando este señor haga un escrito a la Hermandad. No puedo estar entrando en internet todos los días para ver lo que dice un hermano, eso no es un documento oficial. Así no se debería funcionar en las corporaciones, las cosas hay que hacerlas bien, somos ejemplo para toda España (...). Es la opinión de un hermano, que da la casualidad que es el autor de la imagen. El Señor no ha sufrido ningún daño, ni lo va a sufrir".

Por su parte, Martín también niega la posibilidad de un cambio de sede de la corporación al reseñar que "cuando entramos en la parroquia de Nuestra Señora del Buen Aire éramos 22 hermanos, después de tantos años de andadura no puedes el día más bonito irte a otro sitio, aunque sólo fuese para la salida". Insistiendo, en referencia al tema de la parroquia, en que "Pasión y Muerte está en su casa, y debe salir de su casa. Eso es lo que opina esta junta y lo que han opinado la mayoría de hermanos. El que no quiera entender que la vida de una hermandad del siglo XXI se debe desarrollar en su parroquia, está muy confundido".








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