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sábado, 25 de abril de 2015

En mi Huerto de los olivos: Dictadores


Después de escuchar a unos y a otros, de ver vídeos y más vídeos, de leer a unos y a otros sus artículos de opinión, de seguir escuchando a las bandas que han tocado a nuestros pasos y de ver más vídeos tanto de Córdoba como de otras ciudades de nuestra autonomía o del restos de la península Ibérica, me doy cuenta que al final en nuestras hermandades están guiadas muchas por la voluntad de algunos personajes que quieren pasar a la historia de, no sabemos de dónde, ellos seguro que sí.

¿Y por qué digo esto?. Porque de verdad, después de ver muchas de las procesiones que hoy en día se pasean por las distintas ciudades o poblaciones, es difícil de entender por lo menos para mí, que no se respete la historia, la tradición, las formas y las maneras de nuestras cofradías.

No me imagino por ejemplo a la Hermandad de la Macarena, cambiar en su forma de entender a esta hermandad en toda su expresión sin ningún cambio. No me imagino a la Hermandad del Señor del Gran Poder dejarse llevar a la imaginación de un cofrade sea más joven o más veterano cambiar nada de la historia y manera de entender lo que son estas hermandades. O la del Silencio Blanco modificar algo de sus maneras que por tantas hermandades parece ser donde hay que copiar y llevar a las suyas.

Hablo de estas porque son santo y seña de todas las demás, pero está demostrado que aquí nos da igual eso y al final se hace la voluntad de algunos, que no solo mandan o gobiernan sino que en algunas hermandades son casi dictaduras, al estilo Maduro. Es triste pero es así. 

Cambios en la forma de vestir a las imágenes, en los estilos musicales, en las formas de llevar a su expresión las maneras de estos cofrades. Poner en tela de juicio la labor de otros miembros del organigrama de la Estación de Penitencia y después ellos hacer lo que les plazca. Diputados, fiscales, como quieran llamarlo ustedes o tengan el título que sus hermandades les otorguen según el cargo que se les encomiende.

Y lo peor de todo que ellos después te dicen una cosa a la cara y en el momento que te das la vuelta la cambian sin decir nada para que te quedes con el culo al aire. Es muy triste como todo un año trabajando por unos y otros, y estos señores de voluntad dictatorial que no dudo que también trabajen, pero para realizar las cosas como las hacen mejor que se queden en su casa. Pero de puertas para adentro y que no salgan.

Es triste ver como presumen y se alardean de que son los mejores porque todo se hace en torno a ellos y como ellos dicen. Ah, mucho cuidado con no hacer las cosas como ellos han mandado, para después llegar son sus manos adulteras para hacer los que se les venga en gana. También están muy dispuestos a dejar que entren otros miembros a sus hermandades y juntas de gobierno para después mostrar cuáles son sus verdaderas formas y maneras.

Y desde que acabo la máxima expresión de la cristiandad como es la Semana de Pasión de Jesúcristo, no he oído o escuchado a nadie en las hermandades dar la cara por la especie de cruzada que hay en torno a todo aquel que defiende la cristiandad en otras tierras que no sean las tradicionales. Es triste que solo se le dé un sentido festivo, que también lo debe de tener, pero el sentido religioso no se vea. No es en todas, que muchas lo hacen con el verdadero sentido que tiene una Estación de Penitencia.

Y ahora seguiremos escogiendo al mejor capataz, a la mejor banda, al mejor paso que anduvo, al mejor… a la voluntad de… de cada uno de nosotros que jugaremos a ser como se suele decir a seleccionador de fútbol y pondremos según nuestro criterio a quien nos apetezca o nos caiga mejor o simplemente haya demostrado que lo es.

Que disfruten de este fin de semana con la Cata del Vino en Córdoba brinden con una copa por ustedes, y por sus amigos y sus familiares o si se van de romería con la “Morenita” recen por ustedes o por sus amigos o por sus familiares y por aquellos que defienden con la muerte su fe por la cristiandad. Yo rezaré por la parte que me toca y daré gracias a Dios, porque debo de hacerlo.


Pachi Giraldo











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