Guillermo Rodríguez. La desaparición de una banda siempre es motivo de tristeza para los cofrades y para los amantes de la música. El pasado lunes 6 de abril, la dirección de la Banda de Cornetas y Tambores Ntro. Padre Jesús Nazareno Rescatado de Córdoba presentó su dimisión irrevocable al máximo responsable de la hermandad, D. Miguel Gallardo Arce, con lo que la supervivencia de la formación musical cordobesa queda en una situación muy complicada.
Que una hermandad tiene que tener claro si quiere o no a una banda propia es algo que no debe escapar a nadie, mandatarios incluidos. Sea como fuere la historia de la Banda de Cornetas y Tambores Rescatado de Córdoba, si nada lo remedia, lamentablemente puede haber llegado a su fin y con su desaparición, se va al traste la ilusión de unos muchachos que ahora ven tirados por el suelo estos años de esfuerzo ofrecidos al amparo de Jesús Rescatado, mientras sienten inevitablemente que el refugio que necesitaban recibir de los dirigentes de su hermandad no ha sido el que esperaban y precisaban.
Según fuentes consultadas por Gente de Paz, en los pocos años en los que se ha desarrollado esta aventura, se han ido sucediendo condicionantes, que estas mismas fuentes catalogan como extraños, alrededor de la Banda y la Hermandad, traducidos entre otras muestras, en la falta total de confianza en las personas que han compuesto la dirección musical de la formación o la nula aportación económica por parte de la corporación, teniendo que pagarse los componentes casi todos los gastos, entre los que habría que incluir la adquisición de unos trajes, en cuya gestión la banda no tuvo ni voz ni voto.
Habrá mucho que contar sobre este asunto, pero lo que está claro, es que el sueño, tal y como estaba concebido ha terminado. Quizá algún día Israel Guijarro quiera dar su versión de unos hechos que ahora la hermandad también tendrá que explicar a sus hermanos, no hay que olvidar la situación en la que se haya inmersa la cofradía con una nueva convocatoria de elecciones en el horizonte tras la dispensa concedida por la autoridad eclesiástica por la suspensión del proceso del año pasado ante la ausencia de candidatos.
Lo que sí es preciso que nos preguntemos es qué está ocurriendo en nuestras hermandades para que suceda con tanta frecuencia que personas que están 365 días al año luchando por una ilusión reciban, de un modo u otro, un portazo. Para algunos quedará un imborrable recuerdo, para otros quedará en una simple anécdota la vida musical de esta formación, así de triste es la realidad de las cosas.
No descarten que a pesar de todo lo ocurrido, la vida y espíritu de lucha de muchos de estos chavales, que hoy no pueden más, se planteen continuar adelante con la banda por su cuenta o en otro lugar en que se sientan más queridos. El tiempo dirá. Mientras el tiempo pone las cosas en su sitio, les adjuntamos la carta que la Dirección de la Banda ha remitido a la Junta de Gobierno de la hermandad trinitaria.
En el texto, se especifica que concluida la Semana Santa 2015, la Dirección de la Banda de Cornetas y Tambores de Ntro. Padre Jesús Nazareno Rescatado de Córdoba, en fecha 6 de abril, notificó a la Junta de Gobierno de la hermandad mediante escrito entregado en mano al hermano mayor, la dimisión en pleno voluntaria e irrevocable que tiene efecto a partir del día 13 de abril, una vez cumplidas todas los compromisos adquiridos.
Posteriormente, los abajo firmantes solicitaron copia de dicho escrito con registro de entrada en la hermandad a fin de dejar constancia formal de la decisión adoptada por la dirección de la banda. Lamentablemente, por cuestiones ajenas a la dirección, el escrito no fue registrado por parte de la hermandad, si bien, al parecer, ya obraba en poder de la Junta de Gobierno. A pesar de esto, en su afán por dejar constancia formal de la decisión, en fecha de este sábado 11 de abril se ha remitido a la hermandad un burofax con el mismo escrito que ya fuera entregado en mano a D. Miguel Gallardo Arce, hermano mayor de la corporación y máximo responsable de la formación musical.
Esta es la historia, y así se la contamos. Las consecuencias derivadas, aflorarán en los próximas fechas.
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