LO ÚLTIMO

jueves, 3 de septiembre de 2015

La guerra entre un restaurante con Estrella Michelín y la Hermandad del Rocío de Marbella


Blas Jesús Muñoz. Hasta la fecha, en pocas ocasiones, habíamos podido ser testigos del cierre del bar de una hermandad por un ayuntamiento, como ha sido el reciente cierre que ha sufrido el bar de la Hermandad del Rocío de Marbella por parte del Consistorio de la localidad, señalando que "la actividad que se estaba realizando era impropia y decidimos que cesara" -manifestaba, Javier Porcuna, concejal de Industria y Vía Pública.


La decisión del gobierno municipal marbellí viene provocada por el conflicto surgido entre la corporación rociera y el restaurante Skina, el cual cuenta con una estrella Michelín y había denunciado el enorme ruido y algarabía que producía el tablao flamenco de la Hermandad y que repercutía en dicho restaurante y su clientela.

Denuncias vecinales

Los vecinos de la calle Aduar (lugar donde se producían los mencionados ruidos), también han manifestado su protesta por estos hechos, sumándose en un total de 38 a la denuncia del Skina, según declaraba su abogada. Toda vez que, un total de 25, redactaban sus quejas sobre dicho problema.

"No es un capricho, sino algo de lo que va a salir beneficiado todo el mundo. No queremos precintar la Hermandad, sino que exista un respeto. Se trata de que en el centro se pueda convivir. Estoy contento porque este fin de semana ha cesado el ruido y es algo que merecemos todos los vecinos. El problema no era que estuvieran más o menos personas, sino que se les fue de madre. Representamos a Marbella y mi manera de ayudar es hacer que siga creciendo" -señalaba Marcos Granda, Gerente del Skina.

Por su parte, desde la Hermandad del Rocío se ha venido alegando, en diversas ocasiones, que no se trata de un bar. Por contra, señalan que es un lugar de convivencia donde se reúnen diferentes peñas para realizar convivencia y compartir la devoción hacia la Virgen del Rocío.










Hoy en GdP