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lunes, 21 de septiembre de 2015

La presión popular obliga al Ayuntamiento a no tocar la subvención de las cofradías


Blas Jesús Muñoz. La Alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio, en una entrevista concedida a El Día de Córdoba parece seguir retractándose de la escalada de las declaraciones que, tanto miembros de su partido como de su gobierno, han venido realizando durante estos últimos meses.

En dicha entrevista Ambrosio expresa su intención de no modificar la subvención que el Ayuntamiento concede a las hermandades, señalando que "vamos a seguir colaborando, y las cantidades van a ser las mismas". De hecho, se ha reiterado al asegurar que "no solo no hay revisión sino que hay intención de mantener la colaboración con el trabajo que hacen las cofradías porque es un trabajo que tiene una valoración muy importante por parte de los ciudadanos; hacen cosas que si no fuera por ellos el Ayuntamiento no podría desarrollar. Han demostrado que pueden hacer su trabajo bien y se han ganado el respeto de los ciudadanos y del Ayuntamiento y eso se materializa en un convenio de colaboración". 

Sin embargo, dichos propósitos y puesta en valor de las cofradías contrasta con sus explicaciones sobre la no asistencia a actos tan señalados como la Magna Mariana o la Fuensanta, sobre lo que afirma que "estábamos jugando el papel que nos tocaba jugar. Las presencias en primera persona no tienen el valor que algunos le quieren dar, sino que lo importante es que esté la institución. De la misma manera, con la Fuensanta, al Consistorio le corresponde actuar en el ámbito de sus responsabilidades. Queríamos volver a las raíces en la que los vecinos tuvieran el protagonismo que siempre han tenido".

San Rafael, Catedral y labor asistencial 

Tampoco ha pasado por alto una crítica a la labor asistencial que realizan muchas instituciones religiosas de la ciudad, cuando expresa que la de su gobierno "es una manera distinta de concebir las políticas sociales, que tienen que ver con la justicia y la generosidad y no con la beneficencia y la caridad". Sin olvidar que cree mejorable la labor que lleva a cabo el Cabildo en relación a la gestión de la Catedral: "creo que se puede hacer mejor. No se debería dejar la colaboración de todas las instituciones que pueden ayudar a que ese bien luzca más. Tengo una opinión muy favorable de lo que se está haciendo y creo que tiene mucho mérito conseguir un récord histórico, pero es verdad que las cifras del turismo están subiendo en todas partes desde hace unos años."

Respecto a la polémica sobre la retirada del cuadro de San Rafael señala que "algunos se han dedicado a darse golpes de pecho pero no han hecho nada para darle el valor que el cuadro tiene para los cordobeses. Ahora, con su restauración, puede ser un elemento más que haga que muchos cordobeses se acerquen al vestíbulo del salón de plenos". Pasando por alto que no hace demasiado tiempo, en términos de conservación del patrimonio, que dicha pieza ya fue restaurada cuando Rosa Aguilar ocupaba el puesto de primera edil de la ciudad.





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