Blas Jesús Muñoz. A principios de semana conocíamos el giro copernicano que la nueva Junta de Gobierno de la Hermandad de las Angustias pretende dar en relación al acompañamiento musical del magistral grupo escultórico que realizara Juan de Mesa. Un cambio que pasaba por prescindir de la banda de música para pasar un acompañamiento por parte de Cornetas y Tambores.
Un giro en toda regla que, aparte de gustos, implicaba obligaciones contractuales con la Banda de Música Tubamirum, tal y como la misma señalaba en un comunicado del que les dimos cuenta en Gente de Paz. A todo ello, se debe sumar el hecho de que la formación elegida era Coronación de Espinas, una banda de cornetas y tambores en lugar de una banda de música, lo que ha generado reacciones a favor y en contra.
Anuncios y recurso
El anuncio, pese a la premura que ha adoptado el nuevo organismo rector de la corporación de San Agustín, no suponía demasiada sorpresa puesto que, en redes sociales, la banda de cornetas cordobesa había sugerido no pocos indicios sobre el acuerdo que se iba a adoptar.
Sin embargo, atendiendo al Reglamento de régimen interno de la cofradía del Jueves Santo, todo parece apuntar a que la decisión adoptada deberá someterse, cuanto menos, a debate. Puesto que el punto 28.1 indica lo siguiente: "De acuerdo con la tradición y siempre que no exista imposibilidad, el paso de Nuestra Señora de las Angustias contará con el acompañamiento de una banda de música de plantilla completa, que interpretará marchas fúnebres y solemnes acordes al espíritu de la Hermandad."
Así las cosas, en la jornada del pasado miércoles un hermano de las Angustias presentaba u recurso ante el organismo eclesiástico correspondiente en el que, según fuentes cercanas a este medio, pondría en cuestión la legitimidad de la decisión adoptada por la nueva Junta de Gobierno a este respecto, pues el mencionado artículo no contempla el acompañamiento musical de este género y, en consecuencia, habría que haberlo modificado previamente.
Si bien desconocemos la decisión que se adoptará desde Palacio, no cabe duda de que la misma podría acarrear complejas connotaciones, dependiendo del sentido de la misma.