En esta época y en los meses anteriores-ya cada vez más pronto-, se va realizando los acuerdos y firmando los contratos entre hermandades y las bandas que van a acompañar a su/s titular/es la próxima Semana Santa. Es un tiempo, en el cual las hermandades se ponen a buscar -la que lo necesite o cambie de banda que lo acompaña- una banda que ponga la música a las imágenes de Cristo o María, titulares de su corporación.
Durante todo este tiempo, vemos noticias publicadas en Webs de información cofrade, sobre "tal banda ha llegado a un acuerdo con tal hermandad para acompañar a su titular". Otras hermandades reafirman y confirman la continuidad con las formaciones musicales que lo han acompañado en su última estación de penitencia.
En cuanto a la forma de búsqueda de la banda deseada, las hermandades utilizan contactos o en estos tiempos con la red de redes, Internet y las redes sociales, en plena ebullición, realizan búsqueda por dichas redes o se publicitan en foros o Webs especializadas. De esto, les voy a contar una cosa, que puedo comprobar, en más de una ocasión, sobre la publicidad de algunas hermandades para la búsqueda de la formación musical cofrade que les va a acompañar, y los ofrecimientos de dichas bandas interesadas.
Hará como dos años, buscando por Internet, información o noticias sobre los acompañamientos musicales de las hermandades de mi localidad, Almuñécar, me encontré con un anuncio en foro cofrade, y más concretamente, en el tema correspondiente a ofrecimientos o búsqueda de bandas, y que seguidamente les voy a relatar. Dicho anuncio una hermandad buscaba una banda que abriera calle y el cortejo en su estación de penitencia, y ofrecía un precio irrisorio para ello. Evidentemente, recibió algunos insultos por parte de otros usuarios, músicos de bandas, que se sintieron ofendidos por tal ofrecimiento, y les recomendó a la corporación, que se abstuvieran banda abriendo su cortejo por tal precio. En cambio, hubo otros mensajes en los cuales, se ofrecieron a acompañarles, aceptando dicho precio ofrecido.
Es verdad, que estamos en el mercado de la oferta y la demanda, pero creo que llega un momento, en el cual debe haber un límite para ello. Esto lo he visto en otros casos con otras hermandades. También es verdad, que muchas hermandades trabajan para conseguir los fondos para pagar todos los gastos que tienen para realizar su estación de penitencia (flores, velas, bandas de música, etc.) y les cuesta mucho conseguirlos. Sin embargo, creo que debe haber un límite en el precio, tanto por arriba como por abajo, y en este caso, si no se puede porque económicamente no puedes costearlo, y ya tienes otra banda, abstenerse de contratar o buscar otra para abrir calle. Ahora ustedes, me dirán que quién soy yo, para prohibir o recomendar que no se lleve dos bandas si económicamente no puede costearla la corporación de pasión, que tenga dicho caso. Ciertamente, no soy nadie para ello, sólo doy mi opinión al respecto.
Pero realmente, creo que, como les he dicho antes, debe haber un límite en el precio de una banda, tanto por arriba como por abajo, para que dicha banda no sufra un descalabro y no sea contratada por su demasiado alto precio. No sé si realmente esto ocurre, que haya un límite en el precio por arriba en las bandas. Lo que creo que si se produce, y es normal, es la negociación en el precio a convenir entre las dos partes, como se produce en cualquier transacción económica entre un ofertante y un demandante de un servicio, en este caso, de la música que van a sonar detrás de un paso o abriendo calle en la procesión de una hermandad.
Para finalizar este artículo, todo esto que les he comentado de esta hermandad, me dio un poco de pena, más bien por las formaciones musicales cofrades, que luchan porque su trabajo tenga un precio acorde, y luchan también por conseguir contratos que les merezcan la pena, económicamente o satisfacerlos musicalmente y personalmente.
Juan Evaristo Callejas Jerónimo
Recordatorio Cruz de Carey: La idolatría hacia algunas bandas