Blas J. Muñoz. Dentro de la naturaleza social de la persona, para que esta se sienta completamente realizada precisa formar parte, no de grupos, sino de proyectos que se incardinen en su modo de vida. En definitiva, ser parte de algo que supera al mero individualismo y nos permite trascender junto al grupo.
Un concepto tan antiguo como el ser humano, creado y por lo tanto completo cuando se abre a las obras de Dios. En este caso, la particular empresa que nos ocupa son los nuevos respiraderos que, el Lunes Santo de 2017, quiere estrenar la Hermandad de la Merced para seguir construyendo su elegante palio.
Ser parte del altar que cobija a Santa María de la Merced está al alcance de sus hermanos y de votos, gracias a la campaña de donativos que la corporación de San Antonio de Padua ha comenzado. La misma ha comenzado con la puesta a punto de un panel donde cada cuadro que se cumplimente se corresponderá con un donativo, estando ya dispuesto en la Cruz de Mayo de la cofradía y, al término de la misma, en su casa de hermandad.
María José Trenas ha sido una de las hermanas que ya ha realizado su donativo, habiendo hecho público la Hermandad este generoso y comprometido gesto. A buen seguro, el mismo es uno de los primeros que conformarán una amplia lista de una de las cofradías más vivas de la capital cordobesa. Un gesto para ser parte de Santa María de la Merced.
