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domingo, 15 de mayo de 2016

La Macarena da un paso crucial para conservar la Basílica


Juan Pérez. Hace unos meses conocíamos que los frescos de las bóvedas de la Basílica de la Macarena (realizaos por Manuel Flores) iban a ser restaurados por por Carlos Peñuela Jordán. Estos y otros trabajos de mantenimiento se vienen realizando en un templo que en aras a la prevención de futuros daños y deterioro de los frescos que ilustran las paredes y el techo del templo, se ha procedido a firmar un convenio de colaboración con el Departamento de Construcciones Arquitectónicas (II) de la Universidad de Sevilla.

Así lo señala la corporación de San Gil quien ha justificado este acuerdo expresando que su finalidad "tiene por objeto efectuar un pormenorizado análisis de muestras extraídas de diferentes zonas de la Basílica, mediante el pertinente ensayo de laboratorio, así como la redacción de un concluyente informe que describa en profundidad el estado del mortero y de las diferentes capas pictóricas. Todo ello, con miras a seguir los protocolos de conservación de dichos frescos y aplicar medidas preventivas que preserven el patrimonio de la Hermandad".

Como también se ha adelantado, el investigador principal de este proyecto será el Profesor Doctor Juan Jesús Martín del Río, quien "suscribió el pertinente compromiso de investigación, en nombre de la Universidad de Sevilla, y en presencia del Hermano Mayor y de diversos Oficiales" de la Junta de la cofradía de la Madrugá.








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