Juan Pérez. A finales del pasado mes de junio Teodoro Mauriño era reelegido como Hermano Mayor de San Bernardo. De 48 años, es hermano de cuna de la Cofradía de San Bernardo, filiación que compagina con la hermandad del Rocío de la Macarena y el Salvador y la penitencial del Gran Poder y lleva más de dos décadas formando parte de diversas juntas de gobierno de la hermandad. Entre sus proyectos más destacados se encuentra el enriquecimiento del paso de palio y la potenciación de las escuelas del Cristo de la Salud en Namakumde y el foro Monseñor Álvarez Allende. Mauriño ha optado a la reelección al considerarlo un ejercicio de responsabilidad y compromiso hacia la hermandad con una lista configurada configurada por hermanos con una dilatada experiencia en el gobierno de la hermandad.
Una de sus primeras decisiones ha sido renovar por los tres años de su mandato a la Banda de Música de la Cruz Roja, según ha anunciado la propia formación. Por lo que los sones de la formación seguirán escuchándose tras la Virgen del Refugio, indicando un hecho a tener muy en cuenta y es que "de esta manera ambas instituciones quedan vinculadas hasta la Semana Santa de 2019, cumpliendo así más de 20 años de fructífera relación entre ambas corporaciones de forma ininterrumpida".
Un momento dulce
Con más de medio siglo de historia escrita sobre el pentagrama, la Banda de Música de la Cruz Roja comienza a atravesar un florecimiento evidente que marca una etapa dulce en su trayectoria. Y estas afirmaciones no son banales y se demuestran a base de acuerdos como el que la formación acaba de anunciar.
Hablamos de la renovación para acompañar por segundo año consecutivo a la impresionante Dolorosa de la Hermandad Sacramental de camas. Así pues, podremos volver a disfrutar de la Cruz Roja el próximo 11 de septiembre con la Virgen de los Dolores Coronada, una imagen de incalculable valor y realizada por las mismas manos que esculpieron a la Esperanza de la Trinidad, Juan de Astorga.
La Banda ha querido, como suele ser habitual en estos casos, mostrar su gratitud "a la Hermandad y al Ayuntamiento de Camas por la confianza depositada en nuestra formación". Una confianza refrendada por el nivel que esta volviendo a adquirir una formación que ya es parte de la historia de la Semana Santa.