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miércoles, 19 de octubre de 2016

La Buena Muerte consuma el cambio de capataces


Carlos Gómez. Como se confirma en multitud de ocasiones, el rumor suele ser la antesala de la noticia, una máxima que repetía hasta la saciedad el gran José María García al que probablemente también hoy darían lecciones de periodismo muchos de los gurús que en los últimos tiempos predican su doctorado desde el púlpito de su prepotencia. Unos rumores que apuntaban al "trueque de capataces" entre los dos pasos de la cofradía de la Buena Muerte y que fue contrastado por Gente de Paz con diversas fuentes que algunos han estado buscando con fruición desde que el pasado jueves este medio adelantase que ésta era la intención de parte del equipo directivo de la corporación de San Hipólito. Una opción que se convirtió en realidad en la reunión que la junta de gobierno de la hermandad celebró el pasado lunes y no el jueves, como estaba previsto inicialmente, habida cuenta de que la noticia adelantada por esta casa provocó la suspensión de la reunión original.

Una reunión en la que, como ya anticipamos, se abordó la designación de los capataces para la próxima primavera y en la que se consumó el "trueque" de martillos entre los capataces de la cofradía, Enrique Garrido -uno de los capataces emergentes con mayor proyección de la ciudad de Córdoba- y Lorenzo de Juan –un clásico y uno de los capataces con mayor experiencia de cuantos se mantienen en activo-. La decisión implicaría que la próxima Madrugá, Garrido, hasta ahora capataz del paso del Cristo de la Buena Muerte se haga cargo de la cuadrilla del palio de la Reina de los Mártires, mientras que Lorenzo de Juan pase a ocupar el puesto de capataz del paso del Cristo. En su condición de miembros del equipo directivo de la hermandad, ambos capataces estaban convocados a la reunión. Recordemos que Enrique Garrido es actualmente Vice Hermano Mayor primero y Lorenzo de Juan era prioste del palio hasta este lunes. Decimos hasta este lunes porque el contrastado capataz ha presentado su dimisión de su cargo de prioste.

La decisión materializa una verdadera revolución en la fisionomía de la corporación que dirige Antonio Leiva, y su primera gran decisión de calado desde que fuese reelegido como máximo representante de la hermandad en las elecciones celebradas el 27 de diciembre de 2015, con un inequívoco resultado de 70 votos a favor y uno en contra lo que evidenció el amplio apoyo cosechado para perpetuar su proyecto. Se da la curiosa circunstancia de que Leiva, que ocupa el sitio que le corresponde como Hermano Mayor en el cortejo de la hermandad que preside, forma parte del equipo de capataces de Garrido, su Vice Hermano Mayor, en el resto de pasos cuyas cuadrillas manda, la Soledad de Santiago, La Virgen de las Lágrimas de la Misericordia y los dos pasos de la Cofradía Universitaria. En estos momentos, queda pendiente de concretar si Lorenzo de Juan aceptará la propuesta de la cofradía pasando a ocupar el puesto de capataz del paso del Cristo.

Foto Antonio Poyato





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