LO ÚLTIMO

miércoles, 21 de diciembre de 2016

El Suspiro del Ángel: La mano, la puerta y la ventana


Joaquín de Sierra i Fabra. Suspira el querubín somnoliento entre nubes celestiales que usa a modo de almohadas en busca del sueño perdido sabiendo que igual que él los miembros de alguna junta han caído en manos de Morfeo y, mientras tanto, la mano izquierda se mueve sin que la derecha lo sepa o sin que la misma quiera saberlo.

Suspiros alados por las puertas que se cierran para impedir la oración y las visitas ocasionales de los fieles y de los que no lo son, pero cuyo peculio es tan válido como cualquier otro para procurar que la fe siga viva por muchos años más.

Suspira el ángel siendo perfectamente consciente de que, por mano de Lucifer, la puerta que sí se abrirá se llevará la Navidad de las casas de Hermandad y la obra social saldrá entonces por las ventanas aplicándose al pie de la letra aquello de que la caridad bien entendida empieza por uno mismo.



Hoy en GdP