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martes, 17 de mayo de 2016

El Cirineo: ¡Que sea la última vez que se duda del Rocío!


Terminó el éxtasis a orillas de la marisma. Alcanzó su ocaso la gozosa sensación de tener a la Madre de Dios al alcance de la mano para escaparse un ratito a visitarla para bañarse en sus pupilas y contarle tus cosas. Se nos escapó de entre los dedos ese instante de respirarla frente a frente que tarda todo un año en acontecer y se difumina como un suspiro. Es la hora de rescatar los recuerdos atesorados y depositarlos suavemente en mi altar de cabecera para recuperarlos de cuando en cuando. Siempre conservo en mi memoria esos momentos que en función de mi propias emociones han sido vividos de manera mágica y en ocasiones trascendental. A veces son momentos de especial intensidad relacionados con la Virgen, con su mirada, con su presencia. En ocasiones son expresiones oídas alrededor, en el Santuario o en la Misa de Pontifical, donde la gente habla bajito en diálogo con Dios o su Bendita Madre sin darse cuenta de que el resto del universo se encuentra en la ribera de sus sentimientos. Y a veces son pequeños detalles como la forma en que una bengala ilumina un simpecado o cómo la mira un alma aferrada a su reja.

Sin embargo si tuviese que recordar los momentos que más me han impresionado en este Rocío que acaba de peregrinar para convertirse en historia, la mayor parte de ellos no han sido vividos en primera persona sino que han llegado a mi a través de terceros y en ocasiones a través de las redes sociales. Si les dijera que este ha sido un Rocío completamente diferente y singular, muchos responderían, sin faltarles razón, que todos lo son. Ningún Rocío es idéntico al anterior ni al venidero. Cada centímetro de camino descontado hasta la reja de los sueños, cada segundo en que la Virgen está en la calle, cada nota cantada por el coro en la misa del Real es diametralmente diferente a cualquier otro instante que se haya vivido con anterioridad y con total seguridad diferirá notablemente de los momentos del Rocío que se puedan vivir en el futuro.

Para que se hagan una idea, este año busqué a la Virgen en los mismos lugares que lo hice el año pasado y ni uno sólo de los instantes vividos se pareció ni siquiera lejanamente a lo experimentado el pasado Pentecostés. Ni la cercanía de la casa de Huévar, ni el paso por la Puebla y Umbrete, ni la llegada a la casa de la Palma o Triana o la visita de la Virgen a la hermandad de Córdoba guardaron ni un solo atisbo de semejanza con lo que había ocurrido hace solamente un año.

No obstante, a pesar de partir de la premisa de que cada Rocío es diferente a los demás, éste, particularmente, ha tenido una señal de distinción adicional, un elemento singular que ha provocado que solamente los más viejos recuerden un Rocío similar, el clima sufrido durante el camino de ida. El rociero es persona curtida en mil batallas, acostumbrada al frío y al calor, a la lluvia y a la fatiga, a no desfallecer por las adversidades que inevitablemente pueden endurecer ese camino que muchos, desde la ignorancia más absoluta, desprecian amparados en ridículos estereotipos que llevan años siendo alimentados por determinada prensa y que nada tienen que ver con las verdades del Rocío.

Lo más doloroso es que desde el propio universo cofrade, ese subconjunto del mundo que para muchos constituye con el rociero las dos caras de la misma moneda, son frecuentes los ataques a una manifestación profundamente religiosa que es objeto habitual de la ridiculización y el menosprecio por parte curiosamente de personas que presuntamente llevan la misma fe por bandera. Nadie pretende que todos los cofrades sean rocieros, sólo faltaría, ni al contrario, si bien es cierto que los ataques y la minimización, prácticamente de manera unánime, tiene un mismo sentido. Jamás he escuchado a rocieros reducir el sentimiento cofrade a la nada, no digo que no los haya sino que yo no los he escuchado, probablemente porque la inmensa mayoría de ellos coge el sombrero y la vara justo después de despedir a la Virgen de la eterna sonrisa en Santa Marina y sin embargo llevo toda mi vida oyendo improperios en el otro sentido. Cofrades de golpe en el pecho que cuando hablan del Rocío lo hacen de borracheras, del manido chistecito del polvo del camino, de juerga sin control y de jarana continua sin malgastar una miserable palabra en hablar del Ángelus, del Rosario, de las decenas de misas ofrecidas o simplemente de la promesa y la oración callada que cada cual porta en sus adentros.

Claro que se come y se bebe en el Rocío, y se pasa bien, y se canta y se ríe, y se ama y se llora. Porque el Rocío para el rociero es la misma vida y todos esos elementos y muchos más forman parte consustancial de ella. Del mismo modo que el capillita puebla con fruición las tabernas cofrades durante el año y las terrazas de los bares cada Semana Santa y a nadie se le acusa de desear que llegue el Domingo de Ramos para atiborrarse de cerveza con un traje de chaqueta impecable y una insignia en la solapa.

La propia singularidad de este Rocío ha generado escenas durísimas, imágenes increíbles de hermandades atravesando los caminos bajo mantas de agua, con senderos absolutamente impracticables, con personas aguantando impertérritas la dureza del barro, la lluvia y un frío especialmente agresivo, bajo un clima apocalíptico completamente diferente a los famosos “chaparrones de mayo que lavan los pinos”. Este ha sido probablemente el Rocío más duro que recuerdan generaciones enteras y el rociero no se ha achicado, no se ha amilanado en su pretensión de acercarse a la Madre de Dios como siempre ha hecho. Tres, cuatro, cinco o diez días bajo este tiempo criminal solamente está al alcance de quienes hacen el camino movidos por la fe, por esa fe verdadera que algunos discuten o niegan desde la comodidad de su desconocimiento. Tras este Rocío, si alguien sigue manteniendo que el rociero hace el camino por la juerga y el cachondeo es mucho más imbécil que sus propios argumentos. Este Rocío debe marcar la frontera que me permita gritar a los cuatro vientos, como cofrade y rociero, ¡que sea la última vez que un cofrade insulta a un rociero cuestionando su verdad!. ¡Que sea la última vez que se duda del Rocío!.

Guillermo Rodríguez










Entre Bambalinas: La luz del Rocío


'Después de la tempestad, llega la calma' reza el dicho que buenamente se puede relacionar con la Romería del Rocío de este 2016. Cuando la primera hermandad (Córdoba, concretamente) se puso en marcha hacia la aldea almonteña nadie se esperaba la dureza y la rareza con la que se iba a desarrollar el camino, si bien el importante riesgo de precipitaciones se encontraba en la mente de todos los romeros dispuestos a emprender esta peregrinación. De tal forma, las múltiples corporaciones han sufrido, en primera persona, los caprichos de un temporal que ha causado inundaciones en los trayectos, alteraciones en los recorridos, así como incomodidades en el peregrinaje de los romeros; un cúmulo de adversidades que han dado como consecuencia la romería más afanosa que nuestros mayores recuerdan, lo cual ha venido a resaltar el sacrificio y la penitencia que supone este ferviente acontecimiento.

Ángel Guirao: "Coronación sigue siendo referente en Córdoba"


Blas J. Muñoz. La formación de cornetas y tambores más veterana de la ciudad, Coronación de Espinas, concluía su curso cofrade este pasado domingo con el brillante acompañamiento musical que brindó a la Hermandad de Fátima. Ello no quiere decir, tal y como explica Ángel Guirao -uno de los responsables de la formación de San Antonio de Padua-, que "si nos llama alguna cofradía, nosotros vamos a seguir ensayando y la banda coge contratos, de hecho hay uno presupuestado". Al hilo de esto específica que "contamos nuestro ciclo de Fátima a Fátima", de lo que se deviene su fin de curso.

Rafael Reyes: "He visto emoción y alegría en la cara de los hermanos"


Blas J. Muñoz. "Fue un día especialmente emotivo para todos, ya comenzando con la Ofrenda. Muchos fueron los que se acercaron a ofrecerle un ramo de flores a la Virgen". Con estas emocionantes palabras, el Hermano Mayor de Linares, Rafael Reyes, comienza a transmitirnos sus sensaciones sobre la celebración que la cofradía de la Conquistadora llevaba a cabo este pasado domingo día 15.

Las bandas que marcaron la agenda cofrade


Blas J. Muñoz. Mientras el fin de semana delimitaba su núcleo central en el Rocío por medio de una participación más que relevante de la Hermandad filial de Córdoba y numerosos cofrades de la capital que allí se concitaban, en la capital del Guadalquivir las cofradías -penitenciales y letíficas- daban cuenta de una agenda que estuvo marcada por el papel de algunas formaciones más que relevantes de la ciudad.

Crónica Gráfica del fin de semana en Córdoba: La Procesión de la Virgen de Fátima según Antonio Poyato


Redacción. Fue el pasado un fin de semana en la Córdoba Cofrade, prolífico en actos cofrades de diversa índole, buena parte de los cuales se han ido desgranando en Gente de Paz a través de las magníficas crónicas gráficas de nuestro compañero Antonio Poyato. La última de ellas tuvo lugar el pasado Domingo, en el barrio de Fátima, en el que la Santísima Virgen que le da nombre recorrió sus calles acompañada brillantemente por la Banda de Cornetas y Tambores Coronación de Espinas que puso el adecuado contrapunto a una tarde de primavera junto a la Madre de Dios.

Estas fueron las bandas que participaron en las II Jornadas de Puertas Abiertas de la Salud


Blas J. Muñoz. Como les informábamos en Gente de Paz, la Banda de Cornetas y Tambores Nuestra Señora de la Salud vuelve a organizar su jornada de Puertas Abiertas. Una iniciativa que nos ha permitido escuchar a músicos de numerosas formaciones tanto cordobesas como de numerosos rincones de la geografía andaluza. Toda vez que estas jornadas se erigen como un magnífico termómetro del magnífico momento por el que atraviesan muchas de nuestras bandas.

Podemos se enzarza internamente por culpa del Rocío


Blas J. Muñoz. La celebración del Rocío 2016 ha sido de las más intensas que se recuerdan, entre otros aspectos, por el encomiable esfuerzo realizado por los peregrinos para alcanzar la Aldea almonteña, a consecuencia de las adversas condiciones meteorológicas. Más allá de este apartado, otros han cobrado su cuota de protagonismo.

Las Hermandades del Rocío de Sevilla regresan a casa


Raquel Medina. Pasada ya la romería, es tiempo de la vuelta. De dejar llorando a los pinos por la marcha de las carretas y de soñar con un nuevo Rocío. Atrás quedará la aldea, pero por delante, de nuevo un camino. Así, las hermandades de Sevilla ya se encuentra caminando hacia la capital andaluza con el júbilo de haber estado en ese lugar mágico, llegando a sus casas con el corazón rebosante de amor y de paz.

El Ayuntamiento de Sevilla concede la Medalla de la Ciudad al Cachorro


Juan Gravina Ponce. El Consistorio hispalense que preside el socialista Juan Espadas, ha decidido distinguir con la medalla de la ciudad a la Hermandad del Cachorro. La misma recibe dicho galardón en reconocimiento a la centenaria devoción al Santísimo Cristo de la Expiración, El Cachorro, así como por el gran esfuerzo que realiza en su acción social en favor de los más necesitados, así como ser el creador del programa de acogida de niños bielorrusos hace ya quince años.

La Redención estrena imagen


José Barea. Un grupo de hermanos de la Cofradía de la Redención de Sevilla ha donado a la corporación hispalense una nueva imagen para enriquecer su patrimonio cultural y artístico. Se trata de una bella imagen de Santa María Magdalena.

La autoría corre a cargo del imaginero onubense Mario Moya Carrasco, y fue presentada el pasado 9 de mayo en la sede canónica de la Hermandad, la Parroquia de Santiago Apóstol.

Los Gitanos se preparan para un intenso fin de semana


Juan Pérez. La Sección Musical de la Hermandad de Los Gitanos no detiene su actividad durante este mes de mayo. Es más durante el próximo fin de semana (20, 21 y 22 de mayo), las actuaciones de las bandas que la componen tendrán un calendario bastante intenso en Sevilla capital con su propia cofradía y en localidad de Camas, entre otros.

La Agenda Cofrade del Miércoles en Sevilla


Sagrada Cena: El miércoles 18 de mayo comenzará el Triduo al Señor de la Sagrada Cena, que se celebrará durante los días 18, 19 y 20 de mayo dando comienzo la Eucaristía a las 20:30 y estando presidida la misma por Rvdo. P. D. Manuel Cotrino Bautista, Párroco de San Román y Santa Catalina. Todos los días desde las 19:30 estará expuesto el Santísimo Sacramento para la Adoración de los Fieles. 

La Vera-cruz de Alcalá del Río celebra sus cultos


Antonio Rendón. En la segunda semana del mes de mayo, la Hermandad de la Vera-cruz de la ribereña localidad sevillana de Alcalá del Río, celebra sus anuales Cultos de Quinario en la Santa Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Asunción. Para ello traslada sus imágenes titulares el Stmo. Cristo de la Vera-cruz y la venerada y Bendita Virgen de las Angustias Coronada, desde su capilla donde tiene sus cultos y rezos, en la Real Ermita de San Gregorio de Osset, hasta la parroquia en la denominada procesión de bajada, por la diferencia de nivel entre ambos templos encontrándose la Real Ermita más elevada que la iglesia parroquial.

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