Carlos Gómez. Fue el pasado 13 de mayo cuando la Hermandad del Císter confirmó, a través de sus canales oficiales de información, el acuerdo alcanzado con la Banda de Cornetas y Tambores de San Juan Evangelista de Triana para que el próximo Martes Santo sean sus sones los que acompañen al Señor de la Sangre durante la Estación de Penitencia que llevará a la cofradía hasta la Santa Iglesia Catedral. Un acuerdo que ponía fin a la vinculación mantenida durante los últimos años entre la corporación de Capuchinos y la Banda de Cornetas y Tambores Esencia de Sevilla, la cual se había convertido en uno de los referentes musicales de la ciudad y que acaba de ser noticia merced al nuevo contrato que liga su camino con el de la Hermandad de la Sentencia, con vistas al próximo Lunes Santo.
La Banda de Cornetas y Tambores San Juan Evangelista que la pasada Cuaresma fue protagonista de una agria polémica, felizmente superada, tendrá por delante el reto de hacer olvidar a su predecesora, un auténtico referente de un estilo muy determinado de banda, dentro del género de las cornetas y tambores, con un estilo, a priori netamente divergente, si bien dotado al igual que el de aquella , de una calidad contrastada y un prestigio fuera de toda duda. Una banda que acompañaba hasta el pasado Martes Santo a Nuestro Padre Jesús Nazareno de Salteras en virtud de una relación que se ha prolongado durante cuatro años.
En apenas unas semanas, la excelente banda trianera comenzará a sentar las bases de lo que podría convertirse en una fructífera relación con su estreno ante los hermanos de la corporación cisterciense. Será el próximo 25 de febrero cuando los muros de la Iglesia Conventual del Santo Ángel, acojan en su seno la presentación oficial de la Banda de Cornetas y Tambores San Juan Evangelista de Triana como la banda del Císter. Una banda fundada en 1994 con la idea de crear una banda juvenil en el seno de la hermandad de la calle Pureza, pero que ha ido evolucionando paulatinamente hasta convertirse, por derecho propio, en una banda con una marcada e insustituible personalidad, cuya presencia promete ser una de las que mayor expectación cause en las calles cordobesas la próxima Semana Santa.