Comunicado Oficial
Con fecha 27 de octubre de 2013 ha sido presentado al consiliario de la hermandad y párroco de San Francisco y San Rodrigo de Cabra, un escrito en el que todos los componentes de la junta de gobierno presentan su dimisión con carácter irrevocable.También se ha comunicado a los hermanos de la cofradía por correo electrónico.
La decisión se ha tomado tras una serie de vicisitudes y debates, que llevan a considerar como inviable el trabajo en la cofradía a los hasta ahora componentes de la junta dado el reducido número de hermanos reales con que se cuenta.
A esta situación se une la comunicación de reclamación por burofax, del pago de una deuda de 30.000 euros que reclama mediante abogado un particular por un préstamo realizado a la hermandad en la persona de su anterior hermano mayor, en contrato privado y del que no había constancia en los cabildos celebrados hasta la fecha.
Otras circunstancias se han ido sucediendo en los últimos meses, pues se les han reclamado pagos no reconocidos en actas ni otros documentos por parte de algunos comercios y entidades. A estas reclamaciones de deudas de las que no tenían conocimiento, se unen las deudas que se tienen contraídas, como la hipoteca del local, con la entidad Cajasur; o el pago pendiente al escultor Antonio Bernal de una parte de la última figura del grupo escultórico.
La Junta de Gobierno de la Cofradía del Descendimiento, presidida por Agustina Olarte, quiere manifestar que durante los meses en que han venido trabajando, solo se han ido encontrando con inconvenientes y “sorpresas”, y que ante la situación de inviabilidad real de la propia cofradía, la junta no puede asumir compromisos previamente adquiridos de los que no tenían constancia los hermanos de la cofradía. Mucho menos con la reclamación de cantidad que ahora se ha solicitado por burofax de una abogada.
La Junta de Gobierno dimisionaria lamenta la decisión adoptada, pero quiere manifestar el agradecimiento a sus miembros y colaboradores, destacando las realizaciones en la obra social que se han venido desarrollando y las actividades encaminadas a ir cubriendo estas deudas.
Al mismo tiempo quieren indicar que su decisión obedece a circunstancias objetivas, dejando atrás todos aquellos comentarios, observaciones, habladurías y otros en los que no quiere entrar; dada la imposibilidad material para poder llevar a cabo estas tareas y dada la situación de inviabilidad de la cofradía.
Cabra, 1 de noviembre de 2013
