LO ÚLTIMO

domingo, 17 de noviembre de 2013

La alegría rociera inunda Córdoba


El Rocío es alegría. Lo ha dicho el obispo de Córdoba en su homilía en la Catedral y lo han demostrado las miles, decenas de miles de personas que han llenado las calles en el cortejo de las cinco filiales de la diócesis de Córdoba. Juntas, bajo el amparo de la Hermandad Matriz representada en su Simpecado, están celebrando el Rocío de la Fe, que ha llenado las calles de estampas primaverales.


Poco antes de las cinco de la tarde se ha puesto en camino la hermandad de Córdoba, junto con la insignia titular de la hermandad Almonteña, siempre entre aplausos, vivas y cantos de sevillanas, desde la engalanada iglesia de San Pablo. A la misma hora iban saliendo las demás: Priego desde San Roque, Puente Genil desde San Francisco, Cabra desde la Trinidad y Lucena, cruzando el Puente Romano, desde el Campo de la Verdad. Con bastante retraso ha comenzado la misa pontifical en la Catedral, aunque el numeroso público dentro y el clamor fuera lo ha compensado todo.


Cohetes, vivas y cantos de sevillanas han acompañado la entronización de los Simpecados en sus carretas para emprender un recorrido por la ciudad lleno de altares instalados por las cofradías. Una multitud esperaba en Las Tendillas una noche mágica con ecos de campo y Pentecostés. Ni siquiera el frío ha podido con el entusiasmo de las hermandades.






Recordatorio #RociodelaFe






Hoy en GdP