Cuando llegaron al lugar llamado "del Cráneo", lo crucificaron… Lc 23 33
Han posado en el calvario la cruz del cénit del
martirio para darte muerte clavado en ella. Una muerte que pretende ser humillante
y que mutará en símbolo para millones de almas. La crueldad es excesiva… cuatro
clavos perforan tu cuerpo maltratado para consumar la horrible tortura que
padeces. Y tu Madre derramando lágrimas de desolación acariciando con su
espíritu agonizante tus heridas, intentando sanarlas vanamente… pero no es
posible… tu destino está marcado. Abrazaste la cruz conociendo el final del
camino que iniciaste con tus hechos. Y asumiste con tu invencible valentía cada
golpe, cada dolor, cada menosprecio… Y aunque podrías con un gesto hacer que
todo esto pasara en un suspiro o simplemente que no sucediese, te ofreces como
cordero para cumplir la profecía y para alumbrar a toda la humanidad.