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sábado, 4 de julio de 2015

Incienso y Carbón: Decisiones políticas


Juan Antonio Martínez. El incienso cuesta olerlo esta semana porque hay mucha carbonilla acumulada en el tiro de la chimenea cofrade y en los turiferarios que no se limpian desde que Juan de Mesa estaba aprendiendo el gremio en el taller de Montañés o desde que Paco Alba decidió una tarde en La Caleta hacer una chirigota distinta a la que le metieron guitarra y creó la comparsa.


Incienso. Le va a hacer falta mucho incienso en forma de ánimos a Rafael Muñoz cuyo nombre va asociado a una saga de capataces que con nombrarlos ya piensas en la Virgen de la Paz. Lo han echado pero no pasa nada porque el que es bueno de verdad siempre se irá con la conciencia tranquila del trabajo bien hecho. Incienso para ti capataz.

Carbón. Se sabe que a los políticos les gusta tela marear la perdiz y responder otra cosa que no diga na´ cuando la pregunta es incómoda, pero es que el concejal de urbanismo de IU es un artistazo del género, un octavilla de los que chillan a muerte como Paquito el Catalán y cuando una decisión de sus socios de Sevilla, los de la Seña, le llevan la contraria el se va a la Unesco y si no le hacen caso se irá a la OTAN porque con tal de no abrir la puerta a las cofradías, el buen comunista se hace militarista. A algunos periodistas, que también se las dan de artistas, el carbón les viene porque ahora critican lo que antes callaban.








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