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miércoles, 19 de agosto de 2015

Los drones no tienen cabida en las procesiones


Antonio Botella. La procesión extraordinaria que protagonizó la Virgen de la Paz y Esperanza el pasado 18 de octubre de 2014 no dejó única y exclusivamente estampas históricas en cuanto al recorrido utilizado se refiere. La salida efectuada desde la Iglesia de la Merced, la entrada en la Catedral o la visita realizada al Convento de las Capuchinas no fue lo único destacable de este acontecimiento, con el que se conmemoraba el LXXV Aniversario de la Bendición.

Y es que una afamada tienda cofrade que se instaura en Córdoba elaboró un DVD, junto con la colaboración de la propia hermandad, en el que se reproducen muchos de los momentos vividos tal jornada. A simple vista no parece que esta información sea de cuantiosa relevancia, pues, en este tipo de ocasiones, son diversas las productoras que se comprometen a filmar el devenir del acto con el objetivo de que la corporación pueda atesorar imágenes de lo acaecido.

Sin embargo, aún queda un dato no citado anteriormente. Esta grabación incluye estampas filmadas desde un dron, lo que proporciona un plus a la reproducción, ya que ofrece unas vistas espectaculares del blanco palio a su paso por las calles califales. Por suerte o por desgracia, dicho elemento no podrá ser utilizado en procesiones venideras, puesto que se ha prohibido su uso.

La Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) ha hecho hincapié en que dichos aparatos no están autorizados ni para fines lúdicos ni deportivos, dado que no pueden sobrevolar sobre aglomeraciones de personas. "Los drones no son juguetes, son aeronaves", recuerda el Ministerio de Fomento, que además indica que hay que utilizarlos en espacio adecuados y respetando las medidas de seguridad, por lo que aquellas personas que incumpla esta norma serán sancionadas con hasta 225.000 euros de multa.










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