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lunes, 5 de octubre de 2015

La Chicotá de Nandel: Yo también iré al Obispado


Nuevamente, tenemos visita al Obispado. Nuevamente, tenemos un incumplimiento de Reglas por parte de un Hermano Mayor. Nada más llegar. Desde el minuto uno. Y ya, hemos ido al Obispado.

El párrafo anterior, puede ser, o el comienzo de la Chicotá, o cualquier conversación de un Hermano de las Angustias con otra persona, o también, la conversación normal y corriente de cualquier hermano de cualquier Hermandad desde años.

El Obispado, ¿qué tendrá? Yo nunca he ido, pero tendré que ir visto lo visto, debe ser precioso, muchos, solo fueron con una pataleta absurda, o un chisme barato, o incluso, amenazaron hace poco con que si perdían porque ganara el otro, iban a ir a contar no sé qué cosa de abrazos inconvenientes para, incluso la Paz Mundial. Esto, en los tiempos en que estamos, es ya de bombo y platillo.

Los conocimientos del nuevo Hermano Mayor de las Angustias en cuanto a lo musical, que si Banda de Música, que si completa, que si partida, ha sido cuanto menos un insulto, sobre todo, para cualquier músico que tenga un mínimo de conocimiento o estudio.

Así, ha echado a una Banda de Música con contrato en vigor, y lo que es peor aún, ha incumplido las normas de la Cofradía.

En cuanto al tema del martillo, no ha echado a ningún capataz, pero no ha renovado al existente, ya que cesa cada Jueves Santo.

Si alguno no sabía nada, que lo dudo, al leer todo esto ya tendrá preparado el teléfono de algún amigo de las Angustias para decirle lo vergonzoso que es todo.

Y yo preguntaría, ¿ahora si vamos al Obispado? ¿Por una Banda y un Capataz ya se ha juzgado a este hombre por los cuatro años de mandato? (con toda mi gran admiración hacia la Banda de Cañete, así como a la Banda de Coronación).

¿Se puede ya calificar el mandato de una persona, la cual, no ha cumplido un mes, con lo que queda de mandato? Es que esto es “para mear y no echar gota” (que hay Hermanos Mayores que mean, y en la calle, echan gota, y luego llaman para que los contactos cofrades les quiten la multa en cuestión).

Es muy de ahora el ir al Obispado, no buscar una solución ante la disposición y elección de este Hermano Mayor y su Junta de un cambio de estilo.

Lo voy a decir de otra forma, en tantos y tantos años de historia, lo que no se puede, es marcar en los últimos ocho años, o un poquito más, el futuro de una Hermandad.

Cada uno tiene sus ideas, con ellas se presenta y, este hombre ha ganado, con su entendimiento musical, que no se ha presentado para Director del Conservatorio, ni ha hecho más, aunque me apene porque conozco a David y a Ángel, que no renovar el cargo de uno y darlo al otro, pero Ángel, es de la Hermandad.

Yo creo, que con tantas veces que el Obispado se ha llenado de razones, como las de votaciones con personas que no podían votar, no cuajando la moción, cuando se ha llenado de reproches hacia Hermanos Mayores malos malísimos, que habían hecho esto o lo otro, no cuajando la cosa, creo, que con tanta majadería, yo también iré al Obispado algún día, a que me cuenten cómo se le abarata la cuota a unos hermanos para que voten cualquier cosa, o para que me expliquen cómo alguna persona, puede tener el valor, o los que iban con él, para quejarse por un punto, el que sea, de las reglas que sean, que uno ha hecho, que uno ha marcado, sin que importe que este punto ahora pueda entorpecer un cambio, para mí, un paso adelante, que no es otro que volver a poner en el mapa a la Hermandad de las Angustias.

Quizá, antes de ir al Obispado, me llegaré por San Agustín, para ver cómo la Hermandad va progresando, no viven los que allí gobiernan a la sopa boba, con bonitos artículos de bonitos y más guapos articulistas o periodistas de postín. Me llegaré a San Agustín, a ver nuestros estrenos, a contarle a mis amigos, de Córdoba, de fuera, que la Hermandad de las Angustias es simplemente, aquella OBRA DE ARTE que nos dejara el paisano Juan.

Quizá, mis amigos sevillanos, los cuales esta semana se echaban las manos a la cabeza por no tener más localizada a esta Hermandad, por no conocer ni siquiera su talla, porque Córdoba, sus hermanos, no le han dado, cuanto menos, más exportación con algún que otro acto, estreno… lo que sea, quizá, quizá mis amigos, me digan como tantas veces me han dicho, que Córdoba tiene esa cosita que ellos aun pareciendo que tienen de todo, para ellos la quisieran (de hecho, ya se tanteó la salida de la talla para la ciudad hispalense hace años, allí no son tontos).

Quizá, les tenga que decir a mis amigos sevillanos que sí, que tras un tiempo las Angustias siguen aquí, que ahí pueden ir a disfrutar de Ella el Jueves Santo, TODO EL AÑO TAMBIÉN, aunque no sé si les diré que tenemos un Obispado precioso, como ya iré, ya veré, y ya les daré mi opinión.


Fernando Blancas


PD: Mi más sincero pésame al Hermano Mayor de la Hermandad de Pasión por el fallecimiento de su padre










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