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sábado, 17 de octubre de 2015

La fotografía que no quería la Alcaldesa


Blas Jesús Muñoz. Era un momento esperado, aunque a buen seguro nadie habría querido verlo donde se produjo, en la Iglesia de San Andrés, a consecuencia de las inclemencias meteorológicas que han impedido a la Hermandad de la Esperanza llevar a cabo su salida extraordinaria camino de la Santa Iglesia Catedral.


Así las cosas y en previsión de la temida suspensión, la Alcaldesa de Córdoba se trasladaba hasta el templo fernandino para hacer entrega a la Virgen de la Esperanza de la Insignia de Oro Municipal. Todo ello, tras unos meses de impás en que la sospecha de que Isabel Ambrosio no iba a ser quien hiciera el acto de entrega fue más que una sospecha.

Como pueden apreciar en la instantánea que les mostramos, los rostros son más que elocuentes. Javier Baena, Hermano Mayor de la corporación, a buen seguro estaba contrariado por la decisión que sobrevolaba el ambiente. A todo ello, el gesto de Ambrosio tampoco expresa una alegría excepcional, probablemente imbuidos por la tristeza de los cofrades, pero en otra dosis -seguramente mayor- a causa de participar en un acto que ni su partido ni su gobierno han deseado y han intentado evitar, al menos ello se desprende de su actitud.

Finalmente, en el acto de entrega también estuvieron presentes tanto el Presidente de la Agrupación de Hermandades y Cofradías como la edil del Partido Popular Carmen Sousa.








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