Antonio Rendón. La Hermandad de Santa Lucia volvió un año más a salir en la mañana del domingo viéndose su recorrido acompañado por un numeroso público, fieles a la Santa de Siracusa, que otro año más está en el exilio de San Román a la espera de la restauración de Santa Catalina.
La Santa nacida en Siracusa, entonces ciudad de la provincia romana de Sicilia y Patrona de Venecia, conocida en el orbe católico como “Santa Lucía”, que significa “La que porta Luz”, que repartió fe y devoción a los muchos feligreses y devotos de esta Santa italiana, que forma parte de la religiosidad popular sevillana.
El cortejo estuvo formado por la Cruz alzada acompañada con dos faroles, que marcan el orden de la procesión, seguido de hermanos con cirios blancos a dos filas junto al Guion Fundacional, representaciones de Hermandades con estandarte y varas, estandarte de la corporación de Santa Lucía, presidencia y el cuerpo de acólitos y el paso de la Imagen.
El exorno floral del paso estuvo compuesta por la tradicional cenefa de claveles blancos en su crestería y sus jarras con fanales rosas rojas. Los respiraderos en 1938 en los cuales destaca el escudo nacional del periodo en que fueron realizado, es decir el franquista, y que al parecer aún no ha sido centro de las iras de la ley de la memoria histórica y bajo opiniones siga dando testimonio de en qué indique en qué periodo fue realizado.
La dulce imagen de Santa Lucía, una obra anónima que podía catalogarse en la escuela sevillana del Siglo XVIII, aunque algunos la quieren catalogar en las eternas gubias de Francisco Antonio Ruiz Gijón, aunque su aspecto actual se debe a la intervención que realizó sobre la misma el imaginero Manuel Cerquera Becerra de la localidad sevillana de Alcalá de Guadaira, el cual renovó entonces su policromía y la estofó con brillantes colores, basado en lo que podríamos llamar un estilo neorrocalla.
La encomiable labor la de llevar el paso del equipo de capataces que dirigió Juan León Lozano, que paseo a la Santa Siracusa al son de la Banda de Música “Nuestra Señora del Sol” que dirige Rafael Ruibérriz, interpretando marchas de carácter marcadamente clásica.
Fotos Antonio Rendón Domínguez
Recordatorio Sevilla ya tiene pregonero