Marcos Fernán Caballero. Por todos los cordobeses es sabido que el futuro incierto de nuestras vidas se solucionará en cuanto se consiga la expropiación de la antigua mezquita –ojo, no la de los jardines de Colón, sino la que hay junto al Triunfo de San Rafael-. Y es que verán, Fernando III, un simple Rey de Castilla que, para colmo de males, fue Santo tuvo los santos coj… de cederle el inmueble a la Iglesia Católica. ¡Ya ven ustedes que ocurrencia! ¡Pudiendo habérsela dejado a la juntita de Andalucía uno no se lo explica!
En fin… que como íbamos contando, por la ciudad andan varios partidos políticos y varias asociaciones sin nada mejor que hacer que llorar, patalear y quejarse incesantemente de que distintos órganos jurídicos dicen que aquello es de quien es (primero porque antes que mezquita fue una basílica cristiana y segundo porque el citado Rey así lo decidió) y punto pelota y se acabó. También cabría preguntarse para qué tantos abrazafarolas que andan por nuestra sociedad se interesan tanto en esto de que la antigua mezquita sea pública, si luego llega mayo con sus flores y sus puentes y los edificios de interés turístico de la juntita de Susanita y del ayuntamiento de Chabeli se cierran a cal y canto dejando en Córdoba una pila de € en los retretes… ¡Da igual! ¡Estamos forrados! ¡Nos suda la nariz que la gente se vaya a Sevilla o a Granada!
En fin… que como íbamos contando, por la ciudad andan varios partidos políticos y varias asociaciones sin nada mejor que hacer que llorar, patalear y quejarse incesantemente de que distintos órganos jurídicos dicen que aquello es de quien es (primero porque antes que mezquita fue una basílica cristiana y segundo porque el citado Rey así lo decidió) y punto pelota y se acabó. También cabría preguntarse para qué tantos abrazafarolas que andan por nuestra sociedad se interesan tanto en esto de que la antigua mezquita sea pública, si luego llega mayo con sus flores y sus puentes y los edificios de interés turístico de la juntita de Susanita y del ayuntamiento de Chabeli se cierran a cal y canto dejando en Córdoba una pila de € en los retretes… ¡Da igual! ¡Estamos forrados! ¡Nos suda la nariz que la gente se vaya a Sevilla o a Granada!
Enmarcados en este contexto, para solucionar el problema de que la mezquita tiene dentro una Catedral y una Iglesia que la mantiene desde el siglo XIII, la asociación Córdoba Laica va y organiza una reunión en el ayuntamiento de Chabeli. El partido de Chabeli dice que no sabe nada de esto que se va a celebrar en el ayuntamiento. Izquierda Hundida (IH), el partido de Pedrito Jones, dice que no pasa nada y va a tratar de explicarle a Córdoba Laica cómo tienen que hacer para organizar lo que quieren (sí, lo que leen). Desde el PP vienen a opinar que como sigamos así cualquier día se organiza en el ayuntamiento un botellón sin que nadie sepa nada y Ciudadanos que cómo van a hacer aquello allí si los convocados superan el aforo de la sala donde se va a organizar el chiringuito laico. Ganemos –los chavales y chavalas del de la cola de caballo- por su parte, cuentan que todo ha sido un malentendido pero que todos los partidos estaban enterados. Córdoba Laica se queja entonces de que la mayoría de partidos se quejen y dicen que es logiquísimo que esto se haga en el ayuntamiento ya que para algo han invitado a los partidos políticos.
Total, que si usted quiere organizar un evento de cualquier tipo en el consistorio de Chabeli, solamente tiene que hablar con Ganemos o con IH e invitar a todos los partidos representados en el ayuntamiento. Tan fácil como eso. Da igual que se trate de un encuentro familiar, una comunión, un bautizo, unos cultos de su Cofradía o… yo qué sé, una reunión de intercambio de parejas… Todo cabe en este ayuntamiento que, a fin de cuentas, se ha convertido con el tripartito giliprogre en una mancebía. Una casa de fulanas, para que ustedes me entiendan.
Total, que si usted quiere organizar un evento de cualquier tipo en el consistorio de Chabeli, solamente tiene que hablar con Ganemos o con IH e invitar a todos los partidos representados en el ayuntamiento. Tan fácil como eso. Da igual que se trate de un encuentro familiar, una comunión, un bautizo, unos cultos de su Cofradía o… yo qué sé, una reunión de intercambio de parejas… Todo cabe en este ayuntamiento que, a fin de cuentas, se ha convertido con el tripartito giliprogre en una mancebía. Una casa de fulanas, para que ustedes me entiendan.
