Esther Mª Ojeda. Tras unos días intensos en los que muchas hermandades sevillanas parecen haber estado sumidas en una apoteosis electoral, esta lunes ha sido La Lanzada la que ha venido a hacer lo propio con una nueva celebración de una jornada electoral que comenzaba a las 18 horas con las candidaturas a Hermano Mayor presentadas por Miguel Calzada y Antonio Ramírez.
Después de unos meses que han hecho visible la diferencia de pensamiento entre ambos candidatos – pronunciándose sobre el derecho de reelección de Hermano Mayor y la necesidad de que exista más de una opción para ocupar ese puesto respectivamente – los comicios han concluido pasadas las 22:30 con la designación de Antonio Ramírez como nuevo máximo responsable de la corporación con un total de 181 votos frente a los 125 obtenidos por el otro candidato.
Con este resultado, la corporación sevillana da un giro a su dinámica de los últimos años e inicia una nueva etapa de la mano de Antonio Ramírez, miembro de la Hermandad de San Martín desde el año 1971. En total suman 45 años en los que ha pertenecido a la cuadrilla de costaleros, ostentando posteriormente y durante diez años el cargo de capataz, además de haber sido prioste primero, tesorero de juventud y diputado.
Durante los últimos meses, ya había dejado patente su acuerdo en algunos puntos con el hasta ahora máximo responsable de la cofradía, que contemplaban la perpetuidad de las bandas, capataz y vestidor, así como la necesaria restauración del Cristo de la Lanzada y la Divina Enfermera.
No obstante, el ya nuevo Hermano Mayor ha declarado en varias ocasiones su intención de fomentar una participación más activa de todos los miembros de la hermandad a la hora de llevar a cabo obras de caridad – que pasan por la creación de una bolsa de empleo y un aumento del presupuesto para la labor social – el trabajo de cultos y la formación de los miembros de la congregación.
Por otro lado y con respecto al aspecto patrimonial, Ramírez también se pronunció acerca de la realización de un nuevo manto bordado para el culto interno y la finalización del respiradero trasero del paso de palio así como otras iniciativas que se tendrán que ir planteando con el paso del tiempo y cuya aprobación dependerá de un acuerdo por parte de todos los hermanos de la cofradía.