Entramos en una semana clave para una multitud de cofrades, una semana donde se amontonan los nervios, los sentimientos, las miradas...El pasado día 24 ya pudimos vivir un prólogo de una de las grandes citas que se nos presenta esta venidera jornada sabatina, y que no es otro que el traslado extraordinario de la Virgen de la Paz, de Sevilla, dirección a la Catedral con motivo de la coronación canónica que se consagrará el 1 de octubre. Así, la hermandad del Porvenir será la protagonista principal de un anhelado acto que, si el proyecto adquiere la firmeza que careció anteriormente, vivirán sus hermanos homónimos cordobeses en el próximo cuatrienio; tiempo pre-establecido como margen para la coronación de la Paloma de Capuchinos. De este modo, la capital hispalense se convertirá en un importante foco de atracción cofrade, si bien coexistirá con otros eventos de gran calado.
Y es que las ciudades coetáneas a la sevillana, como lo son Huelva y Córdoba, también acogerán procesiones extraordinarias, aunque sin la envergadura característica a la que se celebrará en la ciudad de la Giralda. En primer lugar, la vieja Onuba abrirá sus fronteras para todo aquel con gusto a asistir a la salida de la Virgen de las Angustias, perteneciente a la cofradía del Santo Entierro, y la cual conmemorará el centenario de la incorporación del grupo escultórico a su seno con acto de tal calibre. Una Imagen que dista, en cierto modo, de la iconografía popular de la Piedad, lo cual hace atractiva su contemplación, al igual que la talla del Nazareno, de Rociana del Condado, que también saldrá esa misma tarde. Esta última procesión contará con los sones de la Agrupación de Los Gitanos, de Sevilla, un aspecto que servirá de aliciente para ir hacia dicho municipio onubense.
Por último, en la capital de los califas un tricentenario Nazareno Rescatado repartirá bendiciones a quien vaya a su encuentro. Para rememorar el 75 aniversario de la cofradía, ésta ha tenido a bien incluir en el cortejo igualmente a su Titular mariana, la Virgen de la Amargura, que precederá, tal y como si de un Domingo de Ramos se tratase, al paso de Cristo. La Córdoba cofrade ya se ha pronunciado al respecto y 'amenaza' con arropar a otra hermandad que, a buen seguro, no les ofrecerá mayor sentimiento que al Quien dice que es su 'Señor'; lo más irrisorio son los motivos que exponen: la dirección de la hermandad. De traca. Para un sector de cordobeses, es más influyente las decisiones y movimientos que suceden en el seno de la corporación que el fervor que despiertan los Titulares...Inexplicable; no obstante, lo que sí es justificable es el dictamen de mi corazón, que me aferra a las Imágenes de mi infancia y de mi juventud.
Antonio Botella
Foto Antonio Poyato