Nuestros Reyes Magos, los cofrades, no llegan desde países del extranjero, ni van hacia Belén. Los nuestros, a los que este año les escribo mi carta, espero me traigan todo lo que les pido.
“Queridos Reyes Magos, vengan de la Fuensanta o el Campo de la Verdad, del Cerro, o de San Pedro, de San Lorenzo o Cañero, del Naranjo o Ciudad Jardín, del Zumbacón o la Judería, del Alpargate o Salesianos, la Huerta de la Reina, Andújar, Posadas, algún pueblecito de Córdoba, o el mismo Centro de la Ciudad:
Este año he sido muy bueno, por lo que espero me traigan todo lo que les voy a pedir. Creo que he sido bueno, por supuesto que he sido bueno. Solo he hablado cuando me han preguntado, o cuando me han puesto a contar gallinas y he visto que faltaba alguna. He hablado cuando la conciencia ya no me dejaba dormir, y he pedido perdón por el mal hecho, y he pedido cuentas a aquel que lo he visto correcto, para eso estaba a cargo de alguna parcela por él elegida. Total, que aunque piensen en algún lado que he sido malillo… les ruego me traigan todo lo que pido para este año, vaya que el año que viene sea malo de verdad, y ya no me puedan traer nada.
A usted querido Melchor, le pediría que nos trajera a mí, y a todos aquellos a los que nos han devuelto la ilusión, que no la perdamos, fuerza para las personas que han hecho posible nuestra ilusión renovada, nuestros sueños, las ganas de aquello que queda por vivir. Sabe usted que yo y muchos nos hemos sentido por temporadas perseguidos, expulsados incluso de nuestras casas de Hermandad, y espero que no quede fuera de ellas que no quiera estarlo, como era mi caso, ahora que me siento de nuevo invitado a entrar, recibido con un abrazo.
Querido Gaspar, el presente que este año deseo me traiga, es ese juguete que muchos le han pedido, y no es para mí, es para devolverlo a los que en verdad saben usarlo, los que merecen tenerlo. No es otro presente que “Un llamador”. Los llamadores hoy en día vuelan, ¿sabe usted? Hay gente que no sabe andar ni de frente en la calle, ni en la vida, y lo que es peor, serpentean para encontrar un llamador. Le pido pues, señor mago, obre la magia y traiga más de uno si puede, tenga en cuenta que tengo que devolver el llamador a los que les ha volado, y si puedo, porque nos dejen en paz, pues le regalo también uno a los que matan por el.
Como siempre, querido Baltasar, es usted mi favorito. Siempre usted ha sabido desde niño que me entusiasmaba esperar el paso de su Carroza Real. Este año, estará usted contengo, pues los de su raza ya mismo invadirán España, si, cuando PODEMOS derrumbe las barreras.
Yo lo que le pido este año, es que me traiga y envíe a un gestor. Si ya me manda un grupo de notarios, mejor que mejor. No sabe Majestad como andan aquí las cosas. En cuanto uno revisa las cuentas de las hermandades… Las hay que no tienen gestión alguna, faltan gestores, aparte de hombres con cabeza que dirijan la misma. Y ya, ni le cuento como andamos cada vez que se anuncian procesos electorales, da miedo ver las semanas siguientes la que algún avispado ha liado para alzarse con el poder.
¿Cree usted que hay derecho que haya llegado también la corrupción a las Cofradías? Luego los que nos ningunean, claro, leen la prensa, y se mofan a carcajadas, y se burlan de nuestro mundito, el cofrade, ese que tanto le gusta a usted, sobre todo el paso de la Huerta de la Reina, que va allí uno de los suyos escenificado. Sabe usted que también compartimos el mismo gusto, siempre hemos sido muy de hermandades de barrio usted y yo.
Tengan ustedes, sus Majestades, un buen retorno. Tengan cuidado a la vuelta, sobre todo al mirar el tiempo o el volumen de colapso de carreteras si es Canal Sur el que les informa… Lo mismo, les están dando las noticias de la campaña de verano de primeros de Agosto.
Un abrazo, hasta el año que viene, que este año me he portado con los regalos, no son tan difíciles de encontrar, creo yo, hasta un poquito más centraditos, nosotros mismos los cofrades podemos conseguirlos en un abrir y cerrar de ojos, pero como nos falta ese poquito, por eso ustedes que son magos, espero me hagan el favor, ya para el año que viene, lo mismo les pido un Pregonero, unos cuantos pajes para que alguna Hermandad parezca eso en la calle, Hermandad de Penitencia, o me da por pedirles un paso digno para alguna Virgen como la de mi barrio, o algún Hermano Mayor, o algún Consiliario, o …
Como verán, no he pedido este año mucho, podía haber pedido mucho más.”
Fernando Blancas Muñoz
Recordatorio La Chicotá de Nandel: Hasta nunca 2014