Resulta curioso, casi paradójico, que en esta época pre-electoral en la que nos encontramos donde todo son promesas de parabienes para los ciudadanos y buenas intenciones para el futuro por parte de todos los políticos de este país, sean al final los de siempre los que sí cubran las necesidades más básicas del pueblo español...
Si señores, esas corporaciones que huelen a incienso....nuestras Hermandades y Cofradías son las que se están volcando con el Banco de Alimentos ayudando desinteresadamente a la recogida en numerosos puntos de la ciudad de alimentos no perecederos y de aseo personal.
Algo tan simple, tan básico y a la vez tan necesario como es facilitarle a una familia el sustento con el que alimentar a sus miembros es, para los partidos políticos, una nimiedad para ser digna de su consideración alegando que impiden a las personas realizarse dignamente, cuando están inmersos en sus planes de llegar al poder....los que estén abajo que arreen...
Pues señores políticos, esas personas que carecen de lo imprescindible, de lo básico, de lo más elemental como es un plato de comida en su mesa también votan y ante todo son personas, tan dignas como cualquiera, tan válidas como ustedes. A esas personas son a las que hay que ayudar desde las entidades locales, ayuntamientos, diputaciones y facilitarles lo que se les ha negado, en la mayoría de las veces por su política que beneficia a pocos y perjudica a muchos y casi siempre a los mismos.
Este fin de semana, además del Black Friday tan americano, tan comercial y tan laico, también se ha llevado a cabo la Recogida de Alimentos en la que curiosamente, no he visto a ningún candidato, concejal o sindicalista realizando este trabajo tan simple, tan silencioso y tan solidario...sin mitines, sin televisión ni banderitas ondeando. Ah no... que esto no interesa, que no me sirve para promocionarme... que pedir ayuda cuando no se tiene nada y que te la proporcionen rebaja mi dignidad... ¡Qué grandeza!.
En cambio si que he visto a muchos voluntarios de Hermandades y Cofradías, Asociaciones y Colectivos que se preocupan del prójimo sin importarles su intención de voto, que sí les importa el bienestar de las personas y sus necesidades y que no consideran una afrenta a la dignidad ayudar al necesitado.
Si el estado laico que nos quieren inculcar quitando de enmedio todo lo que huele a incienso, significa no tener un plato de comida en la mesa... va a ser que me compro un incensario y carbón de los Tres Reyes..."pa' seguir quemando"
Eva M. Pavón
Fuente Fotográfica Diario Córdoba
Recordatorio: Azahar e incienso: El click “femenino” de una cámara