Carlos Gómez. En San Nicolás, María Santísima de Gracia y Amparo presidión un cuidado y elegante altar efímero dispuesto por el equipo de priostía de la Hermandad de la Sentencia con motivo del besamanos de su dolorosa. Antonio Poyato estuvo frente a la Madre de Dios para dejar constancia de la cita a través de esta crónica gráfica.