El Ayuntamiento, a través de la Intervención municipal, ha devuelto a la Unión de Hermandades la documentación que pretendía justificar la subvención concedida por el gobierno local el pasado año, que ascendió a 105.000 euros para emplear en acción social y mantenimiento patrimonial, conceptos que completaron el montante total con una aportación municipal por el coste de instalar la Carrera Oficial. Cada cofradía recibió 5.500 euros, incluyendo el reparto del resultado económico de la explotación de palcos y sillas durante la Semana Santa de ese año.
Este contratiempo retrasará la entrega de unos fondos muy esperados por las hermandades. Al mismo tiempo, la firma del nuevo convenio, que da vía libre a la liberación del dinero. También se retrasará.
Los fallos detectados, según señalaron fuentes del Consejo a este medio, se relacionan con el cumplimiento de la ordenanza municipal de subvenciones, que se sustenta en una legislación específica y superior; errores como la presentación de facturas que acrediten que el dinero se ha empleado en acciones señaladas en el acuerdo como son las de carácter social y patrimonial; también se exige que se entreguen los originales de las facturas y a lo que añade algún que otro 'olvido' seguramente motivado por el desconocimiento del procedimiento administrativo a seguir y que inexplicablemente ignoraban las hermandades y el propio Consejo, que debió informar e informarse sobre cómo se lleva a cabo cumplimentar la documentación de la forma adecuada y ajustada a la normativa. No obstante, tampoco se pensaba que la revisión sería tan rígida como para echar para atrás el expediente.
Dado que el convenio fue firmado por la Unión de Hermandades, como ente receptor del dinero ocupándose después de repartirlo de forma equitativa a las cofradías, y no fueron las hermandades las que suscribieron el acuerdo de forma individual, la vía de escape para superar esta situación será que el propio organismo cofrade presente los justificantes de determinadas cofradías cuyos documentos están en regla, cofradías que han invertido en caridad o en patrimonio un montante muy superior a lo estipulado de forma global por estos dos conceptos sin que tenga que hacerlo hermandad por hermandad.
Sin embargo, desde Curtidores se ha empezado a solicitar a las hermandades los justificantes pero que estén en regla con el objetivo de volver a presentar la documentación en la Intervención municipal la semana próxima y , cuanto antes, poder firmar el nuevo acuerdo con el gobierno local y convocar el Pleno.
Pese a los inconvenientes surgidos, el objetivo es celebrarlo antes de que concluya este mes de julio y que cada hermandad se lleve el talón con su correspondiente dinero, una sesión de hermanos mayores que, entre otros asuntos, además del esperado reparto que el pasado año fueron de 5.500 euros por hermandad, deberá conocer las cláusulas del nuevo convenio que se deberá haber firmado de antemano.
Aunque la cantidad fija total fue en 2013 de 105.000 euros, se supone que esa cifra deberá crecer por el mayor número de cofradías que ya forman parte de la Unión de Hermandades en relación con el pasado año. Hay que tener en cuenta que la ayuda a caridad y patrimonio se concede a cada hermandad representada en el Pleno, tanto de penitencia como de gloria.
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