Blas Jesús Muñoz. La polémica instalada en torno al denominado "Caso Romanones", cuya investigación judicial sigue su curso por abuso de menores en la archidiócecis de Granada, sigue en auge, si bien Monseñor Javier Martínez ha entregado la documentación que le había sido requerida por vía judicial.
La entrega se produjo en la jornada del día 31 de mayo, tras diversos requerimientos a los que el prelado pareció hacer oídos sordos y que la semana pasada fueron realizados bajo amenaza de que incurriera en un delito de desobediencia que podría haberlo sentado en el banquillo de los acusados.
En un comunicado emitido por parte del arzobispado se expresa que la entrega se inscribe en el marco de la colaboración con las autoridades. Si bien, no es menos cierto que el arzobispo estaba advertido de la comisión de un supuesto delito en caso de no entregarla en tiempo y forma.
Además, según informa Jesús Bastante en religión Digital, la entrega de la documentación también vendría propiciada por otra advertencia emitida desde la Santa Sede que habría tenido su eco en una tensa reunión en la Nunciatura, habiendo aceptado entregar los documentos "a regañadientes".