"Usos Extralitúrgicos de las Iglesias dedicadas al culto". Con este título, que figura en un documento que han sacado los Obispos del sur, se intentará regular los actos a celebrar en nuestras Iglesias. Uno hay veces que no entiende varias cosas del clero, he aquí una más a sumar a mi lista personal.
Para regular, por ejemplo, que una actriz no salga desnuda en una Iglesia para una película, no había que aprovechar este ejemplo para ponerle puertas al campo, como han hecho. Ha habido muchísimos actos con acentuada falta de respeto y fuera de lugar, o mejor dicho, realizados en el peor lugar, una Iglesia. ¿Deben de pagar justos por pecadores?
Un ejemplo. Fiesta de regla de cualquier Hermandad. Presentación del Cartel de esa misma Cuaresma. Por lo visto, si no es todo bien argumentado, y no tienen aprobación de uno, que luego apruebe otro, y finalmente, el que tiene que dar la verdadera aprobación, no aprueba, el cartel deberá presentarse, al contrario de como se ha hecho siempre, en la Casa Hermandad, en una Plaza, en la puerta, o en el salón de la casa del Hermano Mayor.
Otro ejemplo. Último Congreso Nacional de Bandas realizado en la ciudad de Sevilla. Hubo niños, venidos de un sinfín de lugares, tanto de Andalucía como fuera de ella. Estos niños, de poblaciones algunas con no más de 10.000 habitantes, que pudieron postrarse y hacer música ante el Señor de la Salud (Los Gitanos), la Virgen de Sevilla, La Esperanza Macarena, o el Santísimo Cristo de las Tres Caídas de Triana, o su Madre, La Esperanza.
Pues bien. Con este documento en práctica, no podrán estos niños, estos músicos, volver a tocar allí, puesto que ya les digo yo, que no se aprobará que se realice en dichas Iglesias ningún acto de este tipo de ahora en adelante.
¿Le van a leer el documento al niño de 12 años que viene de más de 500 kilómetros, o 300, lo mismo da, y le van a contar que la Iglesia no está para tocarle a las Santas Imágenes músicas que en su honor han sido compuestas y son interpretadas? ¿Le dirán que la Iglesia solo está para que vayan a misas, y que ese sueño que ocurre una vez en la vida, si ocurre, no van a poder seguir cumpliéndolo más niños? No creo que a los niños se les quede muy buen recuerdo de este acto, de esta normativa, realizada por los que mandan, aunque nos manden a la calle.
Lo que inventan estos señores, representantes de Jesús... linces, sin duda, no paran, de acierto en acierto... ¿Qué pensará su Santidad El Papa? Este Papa que a tantos nos ha hablado con verdad absoluta, la de la libertad, NO LA DEL LIBERTINAJE, sin paja, al grano puro y duro. Y es que hay cosas que... ¿Qué pensará su Santidad?
Para terminar hoy mi artículo semanal, ya que hoy no pienso extenderme más, me ha dado la semanita el dichoso documento, si querría hacer una pregunta abierta a los que mandan en nuestras Iglesias, aunque algunos nos alejen de ellas, aunque nos hagan pensar algunas veces que estamos fuera de la misma, tanto físicamente, como en temas de fe.
¿Enseñan en estas asambleas de Obispos la utilización de la doble vara de medir?
¿Nos jugamos algo a que a algunas hermandades de Andalucía son beneficiadas en comparación con otras, en cuanto a la permisividad para algunos actos, con respecto a las demás?
El ejemplo, lo tienen en Córdoba bien claro, el favoritismo, también existe en la Iglesia. La permisividad, en algunos casos es bien vista, porque este es bueno. La doble vara de medir viene luego, cuando a otro por lo mismo, no se le permiten las mismas cosas, porque es malo.
La separación de un matrimonio puede ser clave para que no puedas participar con tus hermanos de toda la vida en la Junta de Gobierno de la Hermandad. Incluso, fíjense, si usted ni siquiera está separado, sino que ha contraído matrimonio con una persona que ya ha estado casada anteriormente, puede que no obtenga el permiso para estar en una Junta de Gobierno.
Yo no sé si se tiene en cuenta si esta persona ha sido víctima de un calvario matrimonial, si la cosa no ha cuajado, si ha habido engaño por parte de alguno de los interesados, no sé, la verdad, no sé. Como no sé tantas cosas.
¿Cómo a algunas personas si se les permite formar parte cabecera en una Hermandad y a otras no? ¿Quién decide? ¿Por qué decide lo que decide?
Y con esto termino: ¿No conocen a nadie que esté en una Junta de Gobierno, o voy más allá, a ningún representante eclesial, cuyo camino en la vida sea conocidamente torcido, haciendo un flaco favor a lo que representa? Yo no. Pero quizá alguno de ustedes esta noche haciendo memoria, caiga en algún caso, el cuál pasa tan desapercibido, como el tacto de los que mandan para hacer documentos como del que antes les he hablado.
Fernando Blancas Muñoz
Recordatorio La Chicotá de Nandel