Blas Jesús Muñoz. Cuando comiencen a leer estas
líneas, más que probablemente, se conocerá el nombre del nuevo hermano
mayor de la Esperanza de Triana. Un proceso electoral que, observado
desde la distancia, no deja de recordar en determinadas actitudes a las
de un partido político en toda regla. Más aun, a uno de ésos de los que
ahora se denominan como casta.
Poses estudiadas,
fotografías con "famosos" que reafirmen tu candidatura, mítines -perdón-
presentaciones a diestro y siniestro. Cartas abiertas de los
integrantes de la lista electoral y el famoso "y tú más" que es tan
propio de cualquier debate o rueda de prensa que se posará en los
telediarios como un mantra repetido.
Una de las
candidaturas, desde luego, parece haber abusado de ello, hasta el punto
que han aparecido mensajes por la red en los que, supuestamente, se
ofrecían buses a los votantes para ir a votar. Acto que recuerda
aquellos otros en que se llevaba a las ancianas con la papeleta hasta el
colegio electoral.
Actuaciones, en general,
que recuerdan a lo dicho, a lo que se viene a llamar casta. Entre tanto,
el Arzobispo dice, genéricamente, que prefiere candidaturas de consenso
y es perfectamente comprensible que las prefiera a este espectáculo
fútil que, a la larga, a la media y a la corta, no hacen sino dañar la
imagen con lo que la sociedad en general rechaza de otros estratos de la
misma.