Antonio Botella. La Hermandad de Jesús Caído, de Córdoba,
continúa con el proceso preservador de conservación de su patrimonio. Si
hace unas semanas la hermandad retiraba del culto a la Imagen del Señor
con motivo de unos problemas en la peana, en estos días tiene lugar la
restauración de los dragones que soportan los faroles del paso.
Los mencionados faroles presentan ciertas fisuras, causadas
en la madera debido al roce del perno de hierro sobre el que reposa la
pieza con el dragón que lo recubre. Así lo ha hecho saber la cofradía de
San Cayetano, la cual ha puesto remedio a este problema que lleva
sucediéndose en los últimos años.
Un periodo de tiempo en el que se apreciaba el incremento
del movimiento de los faroles cuando el paso era portado por los
costaleros. Y es que estos elementos sufren en cada salida procesional,
ya que el paso de misterio de Jesús Caído fue diseñado para que
procesionase a ruedas, por lo que, de esta manera, las piezas no
tendrían ningún tipo de problema en su fijación.
Para subsanar este inconveniente, la corporación ha
designado al tallista Miguel Ángel Arroyo Sánchez para acometer las
labores de reparación, que consistirán en la abertura de los faroles y
el relleno con diversos materiales que impidan el movimiento del vástago
que soporta al componente.
Como curiosidad, se ha de destacar que las cuatro piezas
están inspiradas en los faroles de Jesús del Gran Poder de Sevilla y su
respectivo diseño estuvo enfocado en los candelabros de cola de la
Virgen del Mayor Dolor en su Soledad, Titular mariana de esta señera
hermandad cordobesa.
