Redacción. María Santísima de la Estrella procesionará el próximo Domingo de Ramos bajo el palio que diseñara Antonio Garduño Navas y ejecutaran los talleres de bordados de Fernández y Enríquez. Está bordado en oro sobre terciopelo azul. Se estrenó en 1995.
Las bambalinas frontal y trasera se dividen en tres secciones en las que el bordado parte de cada una de ellas desde el centro y, en forma de espiral, va ocupando toda la superficie hasta llegar en los extremos a resolverse en una contracurva. Simulan hojas de cardo, pámpanos que se entrecruzan, pequeñas rosas, hojas de acanto, roleos de gran grosor, hojas carnosas y el escudo corporativo que pasa a formar parte del conjunto sin resaltar, a no ser por la corona imperial que sobresale en el borde superior.
Las bambalinas son iguales tanto en su parte exterior como interior, salvo en la parte trasera del escudo que continúa la misma línea de decoración vegetal con macollas. Están enmarcadas por una moldura bordada en hilo de oro y sobre ella parten dos pequeños querubines o cabezas de angelitos realizados en marfil y alas bordadas en hilo de oro, para ser rematadas finalmente por una crestería también bordada en el mismo tipo de hilo y separada por unas perillas de plata en forma de estrella de las que cuelgan los cordones y borlones.
Las caidas laterales tienen la misma decoración que la frontal y trasera, a excepción de los escudos, y están divididas en cinco secciones. Se encuentran rematadas solamente por una pequeña moldura bordada en hilo de oro en forma espiral, y decoradas por cinco querubines también de marfil y alas bordadas, cuyos cordones penden de las perillas de los varales.
El techo de palio está realizado completamente a juego con las bambalinas. En el centro se representa una Gloria aludiendo a las dos mártires de Triana y Co-Patronas de Sevilla, Santas Justa y Rufina, con sus motivos iconográficos, portando la Giralda, hojas de palmas y cerámicas, pintadas sobre paño de seda, y cuyos rostros y manos están realizados en marfil. El óvalo en el que se encuentran enmarcadas está bordado en hilo de oro con decoración vegetal.
Existe una separación entre el marco central y las esquinas del mismo efectuada por doce estrellas de siete puntas. Sobre el terciopelo azul se ven las hojas y roleos que quedan entrelazados unos con otros dando muy poca oportunidad a los bordados aislados y sueltos, consiguiendo una absoluta simetría entre las cuatro esquinas. Predomina la rocalla, aunque se ve acompañada de pámpanos, hojarascas, rosas y florecillas.