Juan Pérez. Sevilla vive este Jueves uno de sus días grandes, sin lugar a dudas uno de los días más importantes del año, una jornada marcada con rojo en el calendario de las grandes fiestas y grabada a fuego en la tradición centenaria de una ciudad que respeta su pasado y valora su memoria.
El Jueves de Corpus se iniciará muy temprano, como manda la costumbre. El cortejo se pondrá en camino a las 8:15 de la mañana, por la Puerta de San Miguel de la Santa Iglesia Catedral, para recorrer unas calles especialmente engalanadas para la ocasión, alfombradas de romero y repletas de altares y símbolos que marcan el devenir de una jornada que se vive con especial intensidad en la Sevilla más auténtica, la heredada, la que construye su futuro sobre los cimientos del respeto a su pasado y su presente.
Un cortejo en el que participará toda ciudad representada por los diferentes estamentos institucionales que no faltarán a su cita con el pueblo que se congrega para rendir pleitesía a Jesús Sacramentado que recorrerá simbólicamente la ciudad de San Fernando en la magnífica Custodia de Arfe.
Tras los niños con carráncanos de la Sacramental del Sagrario, caminarán las hermandades de Gloria por riguroso orden de antigüedad, seguidas del primer paso del cortejo procesional que porta a Santa Ángela de la Cruz. El paso, exornado por la Hermandad de la Amargura, y dará el testigo a las hermandades de penitencia hasta el Silencio. Tras ellas llegará el paso de Santa Justa y Rufina, las hermandades de penitencia desde el Silencio hasta el Calvario y el Apostolado de la Oración, Luz y Vela, Adoración Nocturna. Seguidamente el paso de San Isidoro exornado por la Hermandad de las Tres Caidas y tras él las hermandades sacramentales hasta el Santo Entierro.
San Leandro recorrerá las calles en un paso adornado por la Hermandad de la Macarena y tras él será el turno del resto de hermandades sacramentales, la representación de los Ejércitos de Tierra, Mar y Aire y el comandante militar con el pendón de San Fernando que anunciará el paso del Rey Santo, acompañado por la Banda Municipal, y diversos estamentos públicos como la Universidad, los representantes de los Colegios Oficiales y las Cámaras de Comercio o la Policía.
Posteriormente llegará el paso de la Inmaculada cuyo exorno corresponde a la Hermandad del Silencio tras la que formarán las insignias de las cuatro basílicas menores de Sevilla, la Asociación de Nuestra Señora de los Reyes y la Archicofradía Sacramental del Sagrario. Casi al final del cortejo se situará el paso de la Santa Espina seguido de la curia y el Cabildo Catedral y como indiscutible colofón llegará la impresionante custodia de Arfe con Jesús Sacramentado en su interior para recibir el respeto y el cariño de la ciudad de Sevilla, representada en su pueblo y sus representantes que más allá de filiaciones de una u otra índole, acudirán a una cita que es consustancial al cargo que ostentan.
Una jornada que se convertirá en una gota más de la ingente historia devocional de la ciudad de Sevilla para alimentar su historia y conservar su memoria.
Recordatorio La Agenda Cofrade del Jueves en Sevilla