Blas J. Muñoz. En la jornada de este miércoles día 24, la procesión de María Auxiliadora nos dejaba momentos de gran intensidad. Es por ello que hablábamos con uno de sus capataces, el de la cuadrilla de San Juan Bosco, el cual nos narraba las magníficas sensaciones vividas en dicha jornada. De esta manera, Jesús Bastante convenía en señalar que "no puedo tener queja ni de los costaleros, ni de la Asociación (de María Auxiliadora). Me acogen, me dejan trabajar, creen en mí".
Al hilo de ello, Bastante reflexiona sobre el momento por el que atraviesa la cuadrilla de San Juan Bosco, sobre la que indica que "en estos dos años se va consolidando y éste he tenido que trabajar incluso con picos". Señala igualmente que no tiene palabras para definir lo que está viviendo que califica como "súper emocionante". Indica que hay una horquilla de edad entre los costaleros que va desde los 16 años hasta los que superan de largo los veinte.
Así las cosas, no duda en afirmar que "disfrutan y van todos a una. Ayudándose los unos a los otros que es el verdadero sentimiento costalero". Esto sin olvidar valores como los de la humildad que tanto se precisan para que el costalero realice su labor en plenitud.
Asimismo, Bastante recorre los instantes que más emoción le produjeron durante el desarrollo de la procesión. De tal forma que recuerda la primera levantá en el patio del colegio Salesiano que realizaba Juan Carlos Vidal que "para mí es un referente y mi maestro". Destaca además el camino de regreso, donde la cuadrilla quería más.
Todo ello, sin olvidar a su equipo de auxiliares, "somos una piña", explica. Y haciendo referencia al hecho de que haya en la cuadrilla miembros que salen con él como costaleros en otros pasos y "ver a compañeros míos que estén abajo ayudándome... no tengo palabras para definirlo".
