Niño, siguen las negociaciones en Isaac Peral para ver qué se hace con el tema del traslado de la carrera oficial, que ya aburre aunque uno tenga más paciencia que el santo Job. De momento del asunto en cuestión prefiero no comentar nada, porque uno la pasada semana confiaba en que se impusiera el sentido común y, de momento, parece que más bien de eso hay poco.
Sí me ha llamado la atención, niño, viendo las fotografías que se hacen los que mandan en las hermandades cuando terminan las reuniones de día lo urgente que es que muchos hermanos mayores contraten asesores de imagen. Porque vale que no es necesario ir en chaqué a la Agrupación... pero una cosa es eso y otra es ir vestido como si se fuera a la playa. ¡Vaya poco saber estar! Si por mí fuera el curso de protocolo que ha montado la Agrupación sería obligatorio para todos los componentes de las juntas de gobierno.
Y una duda, niño. ¿Tú vas a ponerte con la colección de medallas de las Vírgenes coronadas del periódico o te vas a esperar a que saquen otra con las caras de los capataces que las llevan? ¡Vaya tela, hijo mío!
Yo ya te digo que voy a aguardar a ver si en la edición del periódico en Córdoba sacan las medallas con los bares que preparan los 10 mejores salmorejos y entre ellos está mi taberna.
Julio el Tabernero