La Antigua, Insigne y Real Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de los Dolores es una cofradía de la ciudad de Jaén. Su sede canónica es el Santuario de Nuestro Padre Jesús Nazareno.
La cofradía se
funda en el desaparecido convento de los Padres Carmelitas Descalzos. No se conoce la fecha pero se sabe
que existía en 1594. Los
hermanos, como penitencia, portaban grandes cruces de madera. Sus primeros
estatutos son de 1704. El 22 de marzo de 1852 se aprueban unos nuevos.
Tras la desamortización en 1836 se traslada a la Iglesia del Sagrario, y desde allí al
convento de la Merced en 1946. Posteriormente en 1970 pasa
a la Catedral, donde
permanece hasta 2009, año en
el que se traslada de nuevo a la
Iglesia del antiguo convento carmelitano, que actualmente es Santuario de Nuestro Padre Jesús Nazareno.
En 1862 el Rey consorte Francisco de Asís de Borbón le
otorgó el título de Real. Posteriormente, en 1878 la infanta Isabel de Borbón y Borbón es
nombrada Cofrade de Honor y en 1904 el Rey Alfonso XIII Gobernador Honorario.
Nuestro Padre
Jesús Nazareno, representa a Jesús portando la cruz. La imagen es anónima del siglo XVI. Algunos expertos creen que es
obra del escultor Sebastián de Solís,
por las similitudes que tiene la cabeza de Jesús con la del Cristo del Calvario
de la Iglesia de San Juan,
además de la coincidencia de fechas, ya que la talla de Nuestro Padre Jesús
Nazareno es de finales del siglo XVI o
principios del XVII, fecha
que coincide con la época de Sebastián de Solís. Va acompañado de Simón de Cirene, que ayuda a Cristo a
llevar la cruz. Es obra del escultor valenciano Luis Montesinos. Fue regalada a la cofradía por la congregación
de soldados romanos, sirviendo como modelo su capitán Tomás Cobo Renedo. El
paso es barroco, realizado por Antonio
Sánchez González en 1949.
Leyendas
El Abuelo
Cuenta la leyenda
que un misterioso anciano pidió alojamiento en una casería a las afueras de Jaén, hoy
conocido como Casería de Jesús. En la puerta de la casa, reposaba el
tronco cortado de un árbol y el anciano comentó a los dueños que él podría
hacer una talla de Cristo con esa madera y que solo necesitara un lugar
tranquilo para trabajar. Así que se encerró en una de las habitaciones de la
casa y durante toda la noche no se escuchó ningún ruido, ni tampoco durante
toda la mañana del día siguiente por lo que los dueños de la casa decidieron
entrar en la habitación para ver que sucedía. El hombre ya no estaba, nadie lo
había visto u oído salir. Y en el centro del habitáculo, junto a restos de
virutas y trozos de madera, se erigía la talla de un Jesús Nazareno.
Llave del Hospital
En el siglo XVII una brote de peste
asolaba la ciudad cuando las autoriadades decidieron realizar una procesión con
la imagen del nazareno hasta el hospital en el que se trataba a los enfermos de
peste. Desde ese mismo momento la enfermedad cesó y los enfermos comenzaron a
recuperarse de la enfermedad que había terminado con la vida de cientos de
ciudadanos, hasta el punto, de que en pocos días el hospital fue cerrado ante
la inexistencia de enfermos.
Por ello la imagen
porta en sus manos una gran llave, copia de la que daba acceso al hospital, Y
Nuestro Padre Jesús Nazareno obtuvo la dignidad de Hijo Predilecto de la ciudad.