Ahora que estamos a las puertas de nuestra ansiada Cuaresma, vemos como en los diferentes diarios locales aparecen, perdidas entre sucesos o información agrícola, alguna que otra noticia o programación cofrade que durante el resto del año, no han tenido repercusión alguna o de forma muy escasa.
Y es que, como vemos cada año, el interés de los medios por nuestra Semana Santa se reduce a ese espacio de tiempo que ocupa la Cuaresma y la propia semana grande. Tal es la escasez de información cofrade durante todo el año que, de no ser por las diferentes páginas webs o blogs cofrades que a día de hoy abundan en la red, y gracias también al auge de los perfiles cofrades en las diferentes redes sociales, no podríamos mantenernos al tanto de los diferentes actos y acontecimientos que completan la vida social de nuestras hermandades que, como todos sabemos, va más allá de la Cuaresma y la propia Semana Santa.
Alguna vez que otra me he llegado a preguntar si es que realmente las hermandades no generan información suficiente al cabo del año o es a los medios a los que no les interesa dicha información; después de ver la realidad de nuestras cofradías sólo me cabe pensar que es lo segundo, que a los medios no les interesa realmente la información de las cofradías, y que, salvo en contadas ocasiones, excepciones que confirman la regla, como suele decirse, no ven a ese público potencial, no ven a todos los que habitamos las páginas webs, blogs o redes sociales en busca de esa información que internet nos ofrece y que no vemos en las páginas de los diarios, lo cual hace pensarnos cada vez más el comprarlos.
Hablando no solo de los diarios, también se me antoja tratar el tema de las revistas cofrades, desde la extinta “Alto Guadalquivir”, ya solo nos queda la propia publicación de la Agrupación de Hermandades y Cofradías de nuestra ciudad, el “Córdoba Cofrade”, una revista que, por su propia naturaleza “desactualizada” y limitada tan solo a Cuaresma y a Glorias, exceptuando el número extraordinario con motivo del Vía-Crucis Magno de la Fe, carece cada vez más de fondo e interés, con un elevadísimo precio, y que tan solo llama la atención por las singulares fotografías que nos muestra, a color y a página completa, en algunas ocasiones, algo que tan sólo podemos encontrar en la prensa en los días de Pasión. En este aspecto, los cofrades echamos en falta e incluso envidiamos sanamente la publicación de una revista de forma mensual o incluso trimestral, tal y como podemos ver en otras ciudades vecinas, con reportajes de interés, algo de actualidad y agenda, incluyendo también ilustraciones que hagan que mes a mes acudamos al quiosco en su busca y a poder ser a precio también razonable.
Parece que a la prensa y los periodistas locales tan sólo les interesan las cofradías en Cuaresma y Semana Santa, siempre que no haya por medio algún que otro posible escándalo o tragedia (Dios no lo quiera) que ocupe una o varias páginas completas, lo que me hace pensar cada vez más que la “información” a veces llega a convertirse en “sensacionalismo”, vende más una mala noticia o un posible escándalo, que cualquier otra noticia natural dentro de la vida de las cofradías.
Mención aparte merecen la radio y la televisión, sobre todo la segunda, ya que vemos cómo en estos tiempos la radio pierde cada vez más oyentes y tan sólo crecen las emisoras musicales que se reparten gran parte de un pastel cada vez más pequeño. Pero hablando de las retransmisiones televisivas y los programas cofrades, tenemos mucho que agradecer al programa “Sentir Cofrade”, que mantiene su retransmisión fuera de la Cuaresma y la Semana Santa, pese a la escasa calidad de imagen y reducida accesibilidad al no encontrarse entre la oferta de canales abiertos de la TDT, aunque sólo por ese esfuerzo, merece la pena tenerlo en cuenta. Otro tema que daría para analizar en un artículo aparte es el de las retransmisiones en directo; seguramente no cuentan con los medios técnicos y el apoyo con el que se cuenta en otras ciudades, pero es triste ver como personas con una videocámara de aficionado en mano son capaces de ofrecer mejores planos y mejor calidad de imagen y sonido en los vídeos que vemos a través de youtube u otras plataformas.
A veces me pregunto si esta pésima calidad es debida a que los “profesionales” que trabajan este formato ni son cofrades (como si fuese imprescindible para hacerlo bien...), ni conocen lo que se está haciendo en otras ciudades de una forma maravillosa, sin cortar marchas, sin planos de personas comiendo pipas que no vienen a cuento, sin comentarios que tapen el sonido ambiente magnífico del andar de un paso, en silencio o con acompañamiento musical, y sin continuas confusiones en cuanto a los datos de nuestras hermandades; no creo que sea imposible reproducir lo que se está haciendo en otras ciudades, lo vemos a escala reducida en algunos de los vídeo-aficionados que copan las redes sociales.
A veces pienso que estoy pidiendo demasiado, y envidio de forma sana todos los medios de los que disponen en otras ciudades los cofrades para disfrutar su Semana Santa y sus cofradías, y espero que algún día podamos verlo también aquí en nuestra ciudad, que el interés de los medios hacia nuestras cofradías sea el que merecen. Mientras tanto seguiré pendiente de toda la información que nos proporcionan las redes sociales, blogs y páginas webs de nuestras cofradías.
Paco Afán
Fuente Fotográfica
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Recordatorio Entre lo Divino y lo humano: Ya no quedan mecenas
