El domingo, cuando las luces del día aún no hayan despuntado, el tambor reunirá a los 110 cofrades de la Virgen de Luna de Pozoblanco para ir a por la patrona de la localidad, que también lo es de Villanueva de Córdoba, al Santuario de la Jara.
Tras un día de romería y cruzar la dehesa de la Jara, los pozoalbenses tendrán a la Señora de Luna en la Iglesia de Santa Catalina, tal y como manda la tradición.
Este año, la traída de la Virgen de Luna tendrá restricciones de aparcamiento en los aledaños de la ermita, debido a las lluvias, que han hecho impracticables las cercas más cercanas al Santuario.
Aunque dicho obstáculo no impedirá el desembarco masivo de romeros a la zona, ya que como viene siendo habitual funcionarán las líneas programadas de autobuses.
Entre las nuevas normas impuestas este año por los mayordomos de la cofradía está que la explanada de la Ermita quedará libre de puestos de venta y disponible para la libre circulación de los romeros.
Además, la organización informa de que este año se ha prohibido la instalación de carpas y disco-casetas. La tradición marca que el día anterior a la romería sale el carro.
Antaño salía un día antes para ir preparándolo todo el desembarco de la familia en los aledaños del Santuario. Se trata de un carruaje tirado por una mula y acompañado por la escolta correspondiente dirigida por el Sargento de la cofradía, ya que esta es de carácter militar, parte hacia la dehesa de La Jara.
En este momento es cuando se lanzan las primeras salvas de escopeta en honor de la Virgen. Pozoblanco comienza a oler a pólvora y los vecinos saben que el momento de tener a la Patrona en casa está más cerca.
A las 8.00 horas se reúne la cofradía para partir para La Jara y sobre las 19.00 horas la Virgen está ya en Pozoblanco, donde se le entregan las llaves de la ciudad y el bastón de mando que le pertenece por ser Alcaldesa Perpetua de la localidad.
Tras esta ceremonia es escoltada hasta la Iglesia de Santa Catalina, donde tendrá residencia durante los próximos cuatro meses. El lunes será el día de los cofrades.
Tras la reunión de la Cofradía en la casa del Capitán, máximo responsable, se celebra la procesión por las calles de Pozoblanco, donde, tradicionalmente, la Virgen visita a diferentes hermanos que se encuentran en su camino.
Recordatorio La Virgen de Luna en Gente de Paz